Stellantis y la china CATL anuncian una inversión de 4.100 millones para una fábrica de baterías en Zaragoza
NOTI-AMERICA.COM | ESPAÑA
Stellantis y la china CATL han anunciado este martes la creación de una ‘joint venture’ para la construcción de una planta de baterías de fosfato de hierro y litio (LFP) en Figueruelas (Zaragoza), con una inversión de hasta 4.100 millones de euros.
La fábrica, que se prevé que inicie su producción a finales de 2026 en la planta de Stellantis en la región aragonesa, podría alcanzar una capacidad de hasta 50 gigavatios/hora (GWh), en función de «la evolución del mercado eléctrico en Europa» y del apoyo continuo de las autoridades de España y la Unión Europea, ha señalado el grupo automovilístico en un comunicado.
«No se puede empezar mejor la jornada», ha celebrado el presidente de Aragón, Jorge Azcón, en un mensaje en su cuenta de X (antes Twitter) en el que ha tildado de «anuncio histórico y la mejor noticia posible para la automoción aragonesa» la decisión.
Azcón ha señalado posteriormente en declaraciones a los medios que el trámite administrativo para aprobar la instalación de la fábrica «posiblemente será el más rápido de la historia» y calcula que podrá estar listo en seis meses.
No obstante, la operación está sujeta al visto bueno de las autoridades regulatorias, por lo que se espera que se pueda cerrar a lo largo de 2025.
El presidente de Aragón ha destacado que la decisión de instalar esta planta, clave para la transición hacia la movilidad eléctrica, consolida a la región como un referente industrial en España y Europa.
El sector de la automoción, como ha recordado, representa el 6% del PIB de la Comunidad, el 30,4% del empleo industrial y el 35% de las exportaciones, ha generado en 2023 una facturación de 11.775 millones de euros y da empleo a cerca de 35.000 personas, 4.500 de ellos directamente ligadas a la planta actual de Stellantis.
Asimismo, también se espera que la gigafactoría impulse otras inversiones colaterales, como plantas de energías renovables para abastecer su alta demanda energética, lo que podría suponer hasta mil millones de euros adicionales de inversión.
“Esta diversificación económica abrirá un nuevo mercado que mejorará la balanza comercial, incrementará las exportaciones y aportará miles de millones de euros al PIB de Aragón», ha destacado Azcón, para quien es un proyecto que «va a suponer un impacto económico sin precedentes porque afecta al presente, pero también al futuro».
Además, la planta atraerá talento y fomentará la creación de empleos estables y altamente cualificados en áreas como ingeniería de materiales y tecnología de baterías, lo que consolidará a Aragón como un hub de innovación y sostenibilidad industrial.
El presidente también ha puesto en valor cómo el proyecto refuerza la posición de España como segundo mayor fabricante de coches en Europa y décimo a nivel mundial, al tiempo que fortalece la tradición automovilística de Aragón.
El anuncio llega apenas unas horas después de que este lunes por la tarde, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, se reuniera en el Palacio de La Moncloa con el presidente de CATL, Robin Zeng, para discutir el proyecto de esta futura gigafactoría aragonesa.
El propio Sánchez ha señalado en un mensaje en X que se siente «muy satisfecho» con el acuerdo, destacando la «colaboración público-privada» que ha permitido que saliese adelante. «Gracias a los presidentes de Stellantis y CATL, John Elkann y Robin Zeng, por su compromiso con España y su apuesta decidida por nuestro país para impulsar un futuro descarbonizado», ha recalcado.
A día de hoy, el Gobierno ha destinado, tal y como precisan desde el Ejecutivo, más de 5.500 millones de euros de fondos europeos dirigidos a la reindustrialización del sector de la automoción, y la previsión es que esta cuantía aumente próximamente con el lanzamiento de la cuarta convocatoria del el Perte del Vehículo Eléctrico y Conectado (Perte VEC III), dotada con 1.250 millones de euros.
En 2023, el grupo chino CATL suscribió un primer acuerdo de colaboración con Stellantis para el suministro de baterías con la posibilidad de invertir conjuntamente en su fabricación.
En octubre, el Ministerio de Industria resolvió la concesión de 133 millones de euros a Stellantis Figueruelas dentro de la línea A de baterías del Perte VEC III. Esta subvención se suma a los 14 millones de euros del Perte de Descarbonización Industrial anunciados también en octubre.
En total, el grupo Stellantis ha sido adjudicatario de casi 300 millones de euros, a través de convocatorias del Perte VEC, para la reconversión de Figueruelas, entre otros proyectos.
«El objetivo de CATL es hacer que la tecnología de cero emisiones de carbono sea accesible en todo el mundo, y esperamos cooperar con nuestros socios a nivel mundial a través de modelos de cooperación más innovadores», ha señalado el presidente y director ejecutivo de CATL, Robin Zeng.
En estos momentos, CATL cuenta con dos plantas ya operativas en Europa, una en Alemania y otra en Hungría que, junto con la fábrica española, espera «mejorar sus capacidades» para hacer frente a la demanda de baterías de los fabricantes de vehículos.