AFP/OSCAR DEL POZO – El delantero brasileño del Real Madrid Rodrygo compite con el centrocampista español de la Real Sociedad Igor Zubeldia
Las caras de los aficionados del Real Madrid cuando abandonaban el Bernabéu eran de incredulidad. Y de frío. Y quizá las dos cosas eran lógicas. La primera porque el Real Madrid no había sido capaz de marcar un gol en uno de los mejores partidos de lo que llevamos de temporada. De frio porque, a esa hora, no había más de un grado en la capital, porque el estadio sigue en obras y porque el Barça ya está a cinco puntos con esa nueva técnica de ganar por la mínima todos sus partidos.
Ancelotti ya no teme a sus jugadores de banquillo. La transición de la plantilla es cosa suya y eso le obliga a dar minutos a Ceballos, Rüdiger, Camavinga o Rodrygo. Eso sin contar a Nacho, que siempre es un jugador solvente; Valverde, que ya empieza a encontrar su mejor forma o a Militao, que vive en un pletórico estado de forma que le lleva a pisar el área contraria una y otra vez.