‘NO TENEMOS INDICACIONES DE QUE FUERA UN ATAQUE DELIBERADO’, ASEGURA LA OTAN por redacción
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‘NO TENEMOS INDICACIONES DE QUE FUERA UN ATAQUE DELIBERADO’, ASEGURA LA OTAN
por redacción
Tras el pánico desatado a última hora de este martes por la muerte de dos personas en Polonia tras la caída de un míssil aparentemente de origen ruso, el Secretario General de la OTAN ha rebajado la tensión sobre el incidente. Stoltenberg ha apuntado que el «incidente puede haber sido causado por un mísil de defensa aérea ucraniano».
La calma se impone entre los países occidentales tras lo que ha sido ya calificado como «incidente». Este martes por la noche un mísil caía en un pueblo de Polonia cercano a la frontera con Ucrania y provocaba la muerte de dos personas. Ante la posibilidad de que el misil fuera de orígen ruso, saltó la alarma tanto en Europa como en Indonesia, donde se encuentran reunidos los líders del G20.
Pero tras una primera investigación llevada a cabo por Polonia, la OTAN ha descartado que Rusia quisiera atacar a ningún país de la OTAN. «No tenemos indicaciones de que fuera un ataque deliberado», ha indicado el Secretario General de la Alianza Atlántica, Jens Stoltenberg durante una rueda de prensa en la sede del organismo internacional en Bruselas.
El político ha explicado que tampoco hay «ninguna indicación de que Rusia este preparando un ataque a la OTAN». De hecho, el misil caído en territorio de Polonia, miembro de la OTAN, forma parte de un misil de defensa áerea ucraniano lanzado tras el «masivo ataque» perpetrado por Rusia esta semana. Aún así Stoltenberg ha reiterado que «esto no es culpa de Ucrania. Rusia es la máxima responsable al continuar su guerra ilegal contra Ucrania».
El martes por la noche los líderes europeos, de Canadá, Japón y EEUU que se encontraban en Bali emitieron un comunicado conjunto en el que condenaban los ataques y mostraban su «firme apoyo a Ucrania y al pueblo ucraniano frente a la actual agresión rusa, así como nuestra continua disposición a hacer que Rusia rinda cuentas por sus descarados ataques a las comunidades ucranianas, incluso mientras el G20 se reúne para tratar los impactos más amplios de la guerra».
