Códigos QR con QRty, la fórmula perfecta para ser más accesible a tus clientes
Nota de Prensa
Desde que se instaurara el certificado Covid en los locales de hostelería y en centros como residencias, los códigos QR han alcanzado una relevancia mucho más alta, incluso más elevada que la que tenían antes de esta medida tan polémica.
Algunos Tribunales de Justicia todavía debaten sobre la legalidad de exigir el certificado Covid a los ciudadanos, por intromisión en sus libertades individuales, pero lo que es indudable es que esta tecnología ha supuesto muchas facilidades para usuarios y empresas.
El uso de estos códigos es cada vez más frecuente, por lo que no es de extrañar que muchos negocios estudien su implementación en diferentes soportes para dar más información a usuarios y potenciales clientes.
¿Qué son los códigos QR?
Estos códigos son una evolución del código de barras, pues ejercen una función similar. El diseño sirve para acceder a una información que está encriptada y que por tanto es exclusiva. Cada código es único, diferente al resto.
Y a pesar de que son muy populares en la actualidad, su presencia en el mercado se remonta hasta hace casi dos décadas. El interés desmedido por esta fórmula se debe a que los dispositivos móviles ya incorporan aplicaciones o herramientas para escanear estos códigos.
Hoy en día son muy utilizados por el certificado Covid, pero hasta el uso de esta autorización también eran comunes en locales de hostelería para acceder a las cartas, en los hoteles y servicios de alojamiento para acceder a la conexión WiFi o en lugares turísticos para obtener información relevante sobre monumentos o espacios de especial relevancia.
Los codigos qr se generan de manera sencilla a través de internet gracias a los QR code generator como qrty.mobi, un portal en internet que permite que cualquier usuario pueda acceder de manera directa a esta herramienta sin conocimientos técnicos.
Una vez generados, los códigos se leen en ordenadores de mesa, en portátiles y en todo tipo de dispositivos móviles que tengan software o aplicaciones de captura de imágenes como escáneres o cámaras de fotos. El único requisito es disponer de conexión a internet para acceder a las direcciones web que alojan esa información encriptada.
¿Qué tipos de códigos QR existen?
La creencia generalizada es que estos códigos sirven únicamente para almacenar información de una dirección web. Así ocurre con el certificado Covid, que es el ejemplo que estamos utilizando.
Cuando es solicitado este permiso, el lector accede a la información que oculta el código, demostrando así que la persona en cuestión ha recibido la pauta completa de vacunación rente al Covid 19.
Pero la realidad es que los usos de esta tecnología son muy variados y en ella se puede incluir información de tarjetas de visita, datos de contacto, llamadas telefónicas. Toda esta variedad da lugar a distintas tipologías de códigos.
La primera son los códigos QR para sitio web, que son los que se generan en portales como Qrty.mobi. Es la aplicación más popular y una vez el lector lee el código, el dispositivo lleva directamente a la página oculta.
Otra opción interesante son los códigos que actúan a modo de tarjeta comercial. Su funcionamiento es distinto, pero muy interesante, pues lo que hacen es que al ser escaneados se almacenan como daños añadidos en la lista de contactos.
La tercera alternativa es la de los eventos. Al pasar el código por el lector, lo que sucede es que se guarda un evento en el calendario de manera automática y se activa una alarma, para estar al tanto de cuándo va a ocurrir esa cita o efeméride.
Códigos dinámicos, en qué consisten
El funcionamiento básico de esa tecnología es bastante conocido. Es una herramienta que se ha ido imponiendo en los últimos años y que cada vez es más accesible, pues prácticamente todo el mundo dispone de un smartphone y ya ni siquiera es necesario siempre descargarse una app para tal efecto, sino que basta con la propia cámara.
No obstante, lo que sí es menos frecuente es tener nociones sobre los códigos dinámicos. Se denominan así porque son sistemas encriptados tradicionales que permiten modificaciones en el formato y cambios en su diseño. Los códigos QR estándar no son modificables tras ser creados, pero los dinámicos sí.
El funcionamiento es sencillo, basta con elegir el contenido que se va a cifrar en el código, entre las distintas opciones que ofrece Qrty.mobi, personalizar el diseño para que sea único y descargarlo en distintos formatos.
Los códigos dinámicos pueden ser editados incluso después de ser impresos, algo que no ocurre con los estáticos. A su vez, los dinámicos permiten cambiar la función y el contenido de la información almacenada tantas veces como se desee.
Qrty.mobi funciona siguiendo un modelo de suscripción anual, como otros tantos servicios en la actualidad, pero cuenta con un periodo de prueba de 14 días a precio casi testimonial, 0,50 céntimos para comprobar y utilizar todas sus funcionalidades, sin limitación alguna.