Boris Johnson, nuevo primer ministro del Reino Unido por María G. Zornoza
Fuente: www.aquieuropa.com
No ha habido sorpresas. El euroescéptico Boris Johnson será el sustituto de Theresa May con las riendas del Partido Conservador y del Reino Unido. Es el segundo relevo en los tres años desde los que comenzó el embrollo del Brexit. El exalcalde de Londres tiene por delante una agenda muy complicada y coge el testigo de la líder tory con el partido dividido, la Cámara de los Comunes escéptica y el desafío de sacar al país de la UE.
Tras siete meses de campaña y votaciones, el liderazgo tory ya tiene nombre y apellidos. Las papeletas de los 160.000 afiliados del Partido Conservador no han arrojado ninguna sorpresa y han consagrado a Boris Johnson como el nuevo primer ministro británico por 92.153 frente a los 46.656 conseguidos por su oponente Jeremy Hunt, un puesto que el exalcalde de Londres ansiaba desde hacía tiempo. El exalcalde de Londres ha aglutinado el 66% de los votos, doblando a su rival, tal y como pronosticaban las encuestas.
Johnson asumirá el cargo el miércoles tras una audiencia en Buckingham Palace, el único acto protocolario ya que no hay tal cosa como investidura. Nada más cruzar la puerta del número 10 de Downing Street tendrá que hacer frente a su primera crisis de Gobierno en medio de las tensiones en el estrecho de Ormuz, tras la captura de dos embarcaciones con bandera británica por parte de Irán. Además, de las dimisiones de varios miembros del gabinete de Gobierno como Alan Duncan, alto miembro del Ministerio de Asuntos Exteriores británicos, Philip Hammond, ministro de Finanzas, David Gauke, secretario de Justicia, y Anna Milton, ministra de Educación.
En su breve discurso como recién electo premier, Johnson ha desvelado que sus prioridades son “deliver, unite and defeat” (cumplir [con el Brexit], unir [al partido] y derrotar[a Co) bajo “el acrónimo DUD” (en inglés basura). “Añadiré la E de energise (energizar) y será el acrónimo DUDE (colega, tío)”, ha bromeado.
Theresa May, primera ministra británica hasta mañana, ha sido una de las primeras en felicitar a su sustituto. La todavía jefa del Ejecutivo en Londres ha manifestado a través de Twitter que le apoyará desde la bancada parlamentaria y ha señalado como objetivos comunes “cumplir con un Brexit que funcione para todo el Reino Unido y mantener a Jeremy Corbyn fuera del Gobierno”. Desde la arena internacional las primeras voces en felicitar han llegado desde Estados Unidos e Irán, en medio de su escalada en el golfo Pérsico.
Tampoco ha tardado Michel Barnier, negociador jefe del Brexit por parte de la UE, en mostrarle su mano tendida para ratificar el Acuerdo de Salida y dialogar de forma constructiva. Pero no todo desde Bruselas han sido buenas palabras. Vytenis Andriukaitis, comisario de Sanidad y Seguridad Alimentaria, ha comparado la actitud de Boris Johnson con la de los líderes soviéticos por su “distorsión de los hechos, falsificación de la realidad y contundentes olvidos de realidad”.
En un duro editorial publicado en la web de la Comisión Europea y titulado “Boris, estás equivocado”, el comisario lituano ha alabado la capacidad de diálogo de su rival Jeremy Hunt.
Brexit, el epicentro
Con la llegada de Boris Johnson, el escenario de un no acuerdo del Brexit gana mucha fuerza. Su lema durante la campaña ha sido ‘do die’ (hazlo o muerte) y su cometido es sacar a la isla de la UE el 31 de octubre, con o sin acuerdo. Su rival, Jeremy Hunt, ministro de Asuntos Exteriores, también respaldaba la marcha de Londres, pero su plan priorizaba la renegociación el Acuerdo de Salida con la UE. En cualquier caso, hay un gran número de diputados tories que descartan el divorcio a las malas, lo que podría acabar debilitando a su líder y forzando unas elecciones anticipadas.
Aunque hasta la fecha, Bruselas ha mantenido que el cambio en el Gobierno británico no significa un cambio en la oferta de la UE, lo cierto es que en la realidad sí que hay un giro. La piedra angular de May estaba en el encallamiento de Londres, pero con Johnson las relaciones se prevén más tensas. Ursula von der Leyen, recién elegida presidenta de la Comisión Europea, se ha mostrado dispuesta a prolongar la fecha de salida, pero es una opción ha descartado tajantemente en líder tory. Para el exalcalde de Londres solo hay dos opciones: renegociar el Acuerdo de Salida o marcharse el 31 de octubre sin acuerdo.
Manchas en el historial
Pero si algo destaca sobre su personalidad es su facilidad para cambiar de piel. Johnson podría ingeniárselas para volver a someter a votación el acuerdo de May al que tanto ha criticado y al que el Parlamento británico ha tumbado en tres ocasiones.
Boris Johnson conoce los pasillos de Bruselas. Durante varios años fue corresponsal del rotativo británico Daily Telegraph, una faceta en la que no dejó indiferente a nadie. El periodista se inventó que la UE prohibiría los plátanos o los condones de más de 54 mililitros y contó informaciones con fuentes falsas. Aunque se ha erigido como uno de los rostros euroescépticos por excelencia, Johnson decidió que abogaría por el ‘Leave’ un día antes del inicio de la campaña sobre el referéndum.
Si por algo es conocido es también por sus comentarios xenófobos. Durante su etapa como secretario de Asuntos Exteriores llamó a las personas negras “negritos con sonrisa de sandía”, comparó a las mujeres musulmanas como buzones de correo, calificó de caníbales a la gente de Papúa Nueva Guinea o bromeó con limpiar Libia para convertirla en un parque de atracciones.