El presidente de la Comisión de Asuntos Exteriores de la Cámara de Representantes, el congresista Elliot L. Engel, manifestó hoy que, si bien le complace que una gran parte de la asistencia de Estados Unidos a Centroamérica se mantiene, la ausencia prolongada que tuvo está en la región a largo plazo tendrá graves consecuencias, al mismo tiempo, añadió que el recorte de la Administración del Presidente Donald Trump fue “en busca de su agenda radical y antiinmigrante”.
El presidente de la Comisión de Asuntos Exteriores de la Cámara de Representantes, el congresista Elliot L. Engel. Foto: Archivo
Fuente: https://lahora.gt / Grecia Ortíz
En ese sentido, Engel mencionó que la “fallida política” del presidente Donald Trump hacia Centroamérica ha sido un “regalo para China y otros actores externos que han disfrutado el vacío dejado por Estados Unidos”.
“Al finalizar los programas y luego reiniciarlos, es probable que este enfoque también termine costando mucho más al contribuyente estadounidense a largo plazo con muchos menos resultados. Es por eso por lo que la semana pasada, le pedí a la Oficina de Responsabilidad del Gobierno que evaluara el impacto total de estos recortes de ayuda”, explicó el congresista.
A la vez, expresó que espera revisar la propuesta de la Administración, sobre la asistencia renovada en la región, pues es esencial que la ayuda regrese a mejorar las condiciones en el terreno para que los centroamericanos no se vean obligados a hacer el peligroso viaje hacia el Norte hasta la frontera entre Estados Unidos y México.
Además, enfatizó que esto significa no utilizar la asistencia de los EE. UU., para “perseguir políticas extremas contra los inmigrantes, incluidos los acuerdos ilegales de terceros países seguros que se han utilizado para negar el acceso al sistema de asilo de los EE. UU., Sino invertir una vez más en una América Central más segura y próspera”.
CORTÓ LA AYUDA EN BUSCA DE SU AGENDA RADICAL Y ANTIINMIGRANTE
De acuerdo con Engel, en marzo de 2019, el presidente Donald Trump cortó la ayuda estadounidense a El Salvador, Guatemala y Honduras “en busca de su agenda radical y antiinmigrante”.
Como resultado de esto a lo que Engel llama una decisión equivocada, EE. UU., perdió más de un año y $ 400 millones en esfuerzo a largo plazo para abordar las causas profundas de la migración infantil y familiar desde América Central.
“Estaba en El Salvador encabezando una delegación del Congreso cuando se hizo este anuncio. Vi de primera mano los programas críticos que se eliminaron y conocí a muchas de las personas que se verían afectadas por esta política tonta y contraproducente”, enfatizó el congresista.