EEUU acorrala a Cilia Flores
Hace cuatro años, arrestaron en Colombia a Yazenky Lamas y lo extraditaron a EEUU por cargos de narcotráfico. Lamas fue guardaespaldas de Cilia Flores y con su testimonio se espera que EEUU la acuse de delitos como tráfico de drogas y corrupción, dijeron a Reuters personas que conocen el caso.
Lamas dijo sentirse abandonado por el gobierno de Maduro y firmó un acuerdo de culpabilidad en el que admite cargos por tráfico de drogas y acuerda cooperar como testigo.
Lamas expresó que “Cilia sabía todo” y que vio a sus hijos usar aviones oficiales para viajar al extranjero por diversión, conducir rústicos militares con cajas con dólares en efectivo para almacenarlos fuera de Caracas.
De acuerdo con un artículo de Reuters, se señala que “Flores, una vieja estratega y articuladora en el partido socialista gobernante, primero ganó notoriedad como legisladora y confidente”, para el que entrevistaron a Lamas y a veinte personas más que la conocen. La describen como una política astuta y sigilosa que ostenta gran parte del poder de Nicolás, exige reuniones antes que él, negocia con emisarios nacionales y extranjeros, y con rivales. De acuerdo al exjefe del Sebin, Manuel Cristopher Figuera: “Cilia Flores siempre ha estado tras la cortina moviendo los hilos del poder”.
Tanto Figuera como Lamas confirman el poder nepótico de Cilia Flores, ampliamente documentado con sus decenas de familiares como empleados públicos, pero el reportaje profundiza en decisiones políticas que prescinden del estado de derecho y reiteran sus arbitrariedades.
En 2017, el Departamento del Tesoro de Estados Unidos sancionó a Nicolás y un año después a Cilia.