OPS y MSP de Ecuador presentaron resultados de las investigaciones sobre Desnutrición Crónica Infantil
REDACCIÓN NOTI-AMÉRICA (ECUADOR)
El Ministerio de Salud Pública (MSP) y la Organización Panamericana de la Salud (OPS/OMS), presentaron los resultados de las investigaciones sobre conocimientos, actitudes y prácticas (CAP) que inciden en la Desnutrición Crónica Infantil (DCI), y la evaluación de la consejería para la prevención de la desnutrición.
Estás investigaciones forman parte del Convenio conjunto para el fortalecimiento de la estrategia de comunicación y educomunicación en el marco de la Estrategia Nacional Ecuador Crece sin Desnutrición Infantil (DCI). Mismas que aportaron un diagnóstico preciso de desnutrición y dotaron de los datos y evidencias necesarias para la toma de decisiones y el diseño de políticas públicas más efectivas.
Además, se identificaron temas claves con el objetivo de incrementar el conocimiento sobre la problemática de la DCI en Ecuador y el abordaje de esta a nivel nacional a través de la adopción de estrategias de comunicación y educomunicación con enfoque intercultural, territorial, de género y de derechos, dirigidas a mejorar el control prenatal, el control del niño sano, la lactancia materna, la alimentación complementaria y la suplementación con micronutrientes.
María José Pinto, Secretaria Técnica de Ecuador Crece sin Desnutrición Crónica Infantil, señaló que la Desnutrición Crónica Infantil es un problema estructural que afecta el desarrollo de las niñas y niños, por lo que los aportes de las investigaciones presentadas apoyan a la definición de política pública en favor de la primera infancia. «No solo se garantiza el acceso a alimentos saludables, sino que el paquete priorizado se reciba de forma oportuna y completa para prevenir la Desnutrición Crónica Infantil», dijo.
El MSP ha puesto especial énfasis en mejorar la calidad de las sesiones de educación y consejería brindadas a gestantes, madres y cuidadores de menores de dos años de edad. Los resultados de la evaluación han evidenciado la importancia de la implementación de consejerías interactivas en instancias individuales y grupales; así como, la asignación de material didáctico de apoyo. Para garantizar que todas las mujeres reciban esta atención, se están implementando diversas acciones de capacitación y fortalecimiento de capacidades.
Sonia Quezada, representante de la OPS/OMS en Ecuador, enfatizó el papel fundamental de la cooperación internacional en la lucha contra la desnutrición y destacó los avances logrados en Ecuador gracias a esta alianza. «Dónde hay salud, hay bienestar, y este genera condiciones de paz. Estamos construyendo el camino de la salud para la paz, sin dejar a nadie atrás», afirmó.
Antonio Naranjo, Ministro de Salud Pública señaló que la DCI es un problema recurrente en los últimos 50 años. Actualmente, se agregan nuevos problemas al diagnóstico de la mal nutrición, el sobrepeso y obesidad. Destacó, el compromiso de actores en ambientes académicos, el apoyo de organismos internacionales y del Gobierno Nacional que estableció una Secretaría enfocada al manejo de la desnutrición reconociendo de manera pública la importancia de este problema en el país.
La Autoridad Sanitaria indicó que esta actividad permitirá «el diagnóstico en tiempo real en el tema nutricional, cultural, antropológico, social que arrojará data para decisiones futuras».
Además, con el apoyo del BID, el MSP invertirá más de USD 8.5 millones en la adquisición de material educomunicacional de apoyo para las sesiones de educación y de consejería; tales como, cajas de herramientas, kits didácticos, material normativo y material audiovisual. Estos recursos serán utilizados para fortalecer las campañas de comunicación y sensibilización sobre la importancia del desarrollo biológico, psicológico, cultural y social en la primera infancia.
Gracias a estas alianzas estratégicas, Ecuador está dando pasos firmes en torno a la prevención de la DCI y la reducción de su prevalencia. Los esfuerzos conjuntos permiten mejorar la calidad de vida de miles de niños y niñas y, garantizar un futuro más saludable para las próximas generaciones.