La Corte de Justicia Indígena del Ecuador Nueva Era rechaza todo acto de violencia en el país
REDACCIÓN NOTI-AMÉRICA (ECUADOR).
El presidente de la Corte de Justicia Indígena del Ecuador Nueva Era, MSc. Ab. Álex Bósquez Cáceres, ha expresado su profundo pesar ante el reciente incidente violento que afectó a un familiar del asambleísta Jonathan Parra, miembro del partido Acción Democrática Nacional (ADN), quien ha sido víctima de la creciente ola delictiva que azota al país.
Bósquez Cáceres, en un acto de empatía y humanidad, manifestó su comprensión hacia el pronunciamiento del Sr. Manuel Peñafiel Falconí, extendiendo su solidaridad a la familia afectada y a sus allegados en este difícil momento. Sin embargo, el presidente de la Corte de Justicia Indígena del Ecuador Nueva Era enfatizó que ni el asambleísta Jonathan Parra y su familiar, así como tampoco Peñafiel, están vinculados a su organización.
«Rechazamos firmemente el uso indebido del nombre de nuestra organización para emitir pronunciamientos que busquen generar una ventaja o aprovechamiento mediático en situaciones tan sensibles para el país», declaró Bósquez Cáceres, subrayando el compromiso de la Corte de Justicia Indígena con la integridad y la transparencia.
El trágico suceso involucra al primo del asambleísta, Galo J., quien fue rescatado por la Policía Nacional la tarde del 30 de mayo de 2024. Los dos secuestradores, que lo habían mantenido cautivo en la Isla Trinitaria, al sur de Guayaquil, habían exigido una suma de 2 millones de dólares por su liberación. La intervención de la Policía Nacional fue crucial para su rescate, subrayando la urgente necesidad de reforzar las medidas de seguridad en el país.
Este incidente pone de relieve la escalada de violencia y criminalidad que está afectando a numerosas familias en Ecuador, y subraya la importancia de que todas las organizaciones y ciudadanos se unan en la lucha contra este flagelo. La Corte de Justicia Indígena del Ecuador Nueva Era reafirma su compromiso de trabajar por la paz y la justicia, y hace un llamado a la sociedad y a las autoridades para que se tomen medidas efectivas y urgentes para garantizar la seguridad y el bienestar de todos los ecuatorianos.