El cambio climático es uno de los grandes desafíos de la humanidad y está conduciendo al mundo entero hacia una transformación económica.
Desde el BID estamos convencidos de que América Latina y el Caribe puede ser parte de la solución a los desafíos asociados con el cambio climático a nivel global. Nuestra región es líder mundial en naturaleza y biodiversidad; 30% de su energía proviene de fuentes de energías renovables, doble que el promedio mundial, y concentra importantes cantidades de recursos que se necesitan en todo el mundo, como litio y cobre, para alcanzar importantes objetivos de sostenibilidad. Esto significa también que, en la medida en la que respondemos al cambio climático y caminamos hacia la carbono neutralidad, sectores económicos y procesos productivos enteros van a transformarse. Se crearán nuevos empleos, y otros se transformarán, reemplazarán, redefinirán o desaparecerán.
En esta nota exploramos cómo el cambio climático está modificando los empleos, las habilidades que se necesitan para hacerlos y el mercado laboral en América Latina y el Caribe. Veamos.
¿Qué es el empleo verde?
Son varias las definiciones disponibles, pero en términos generales, podemos decir que se trata de ocupaciones que tienen como objetivo disminuir el impacto ambiental del ser humano, así como la preservación y restauración del medio ambiente. Se trata también de empleos de calidad, lo que se conoce también como trabajo decente. Desde el BID consideramos empleos de calidad a aquellos que incluyen ingresos justos y suficientes, acceso a seguridad social y protección social, y la tranquilidad de un buen ingreso en la vejez a la hora de jubilarnos.
De acuerdo con la Organización Internacional del Trabajo (OIT), estos trabajos se enmarcan dentro de economías verdes, y pueden encontrarse en distintos sectores, desde sectores tradicionales, como la agricultura, hasta otros como servicios ambientales o ecológicos, como, por ejemplo, el sector de la energía renovable.
Un empleo verde resulta de la transformación en los procesos productivos; de la creación de productos respetuosos con el medio ambiente, la administración responsable de los recursos naturales, y del uso de combustibles limpios o energía renovable.
Economía verde, empleo verde y el cuidado del medio ambiente
En los últimos años la temperatura ha ido aumentando exponencialmente en todo el mundo. Según el Informe sobre la Brecha de Emisiones 2021 de la ONU, se espera que la temperatura global aumente al menos 2,7°C para finales de este siglo. Esta proyección supera el objetivo que plantea el Acuerdo de París de limitar el aumento de la temperatura a 1,5°C para 2050.
El panorama climático global exige a los países avanzar hacia economías y formas de vida más sostenibles y que cuiden el medio ambiente. Hacia la promoción de economías verdes: aquellas con actividades económicas sustentables y que utilizan infraestructuras, procesos y herramientas que permiten reducir las emisiones de carbono.
Impactos del cambio climático y la transición a una economía verde
Detengámonos a pensar por un momento en los efectos del cambio climático sobre la pobreza, la generación de empleo y la calidad de vida de las personas. A continuación, exploramos algunos potenciales impactos socioeconómicos del cambio climático:
Aumento de desigualdades ya existentes
Aunque el cambio climático afecta a todos los países y poblaciones a nivel global, no los afecta a todos de la misma manera. Por ejemplo, las regiones y hogares pobres están más expuestos y son más vulnerables a los desafíos climáticos. El cambio climático aumenta la frecuencia y la intensidad de los desastres naturales, y América Latina y el Caribe es especialmente vulnerable pues más de 80 millones de personas pobres viven en áreas de alta exposición a sequías, inundaciones y tormentas. La degradación de los ecosistemas que se produce como consecuencia del cambio climático también afecta de manera sensible a las poblaciones pobres que habitan en áreas biodiversas como el área amazónica.
Creación, transformación y eliminación de puestos de trabajo
La transición hacia emisiones netas cero y economías verdes puede tomar muchas formas y caminos para cada sector económico a nivel global, pero independientemente de su forma, habrá ganadores y perdedores.
La transición hacia emisiones netas cero tendrá grandes impactos en los mercados laborales de la región: se crearán, sustituirán, eliminarán, transformarán y redefinirán puestos de trabajo. Las proyecciones del Banco Interamericano de Desarrollo y la Organización Internacional del Trabajo (OIT) sugieren que América Latina y el Caribe podrían ganar para 2030 15 millones de nuevos empleos netos, en sectores como agricultura, energía renovable, silvicultura, construcción y manufactura, al promover una economía de emisiones netas cero en lugar de seguir las tendencias actuales. El mismo estudio conjunto estima la pérdida de unos 7.5 millones de empleos en industrias altamente contaminantes como las de combustibles fósiles (tanto extracción como generación de energía) y producción de alimentos de origen animal.
Nuevos desafíos para la igualdad y la equidad
La creación de estos nuevos empleos podría producirse en contextos que no necesariamente garantizarán una distribución y acceso equitativos entre trabajadores con diferentes habilidades, ni entre hombres y mujeres. En la actualidad, menos del 25% de los empleos verdes en la región son ocupados por mujeres, y más del 80% de los nuevos empleos creados se encontrarán en sectores actualmente dominados por hombres como el de energía eléctrica. Por otro lado, muchos de los nuevos empleos que se crearán pueden estar en regiones geográficas diferentes a las de los empleos perdidos.
Potencial del empleo verde e impactos positivos de la ruta hacia economías verdes
Si bien el cambio climático presenta un gran desafío a nivel global, con una gestión adecuada, la transición hacia la carbono neutralidad y la creación de empleos verdes pueden representar una oportunidad para impulsar la generación y acceso de más trabajadores y trabajadoras a empleos de calidad. Desde el BID estamos convencidos de que es posible tener un futuro en el que la sustentabilidad ambiental y el cuidado del medio ambiente, el desarrollo sostenible, y el crecimiento económico vayan de la mano.
Si nos aseguramos de conducir una transición justa que incluya programas de empleo verde, se puede promover e impulsar también:
La eficiencia energética y el uso de la energía renovable
La transición de energía fósil a fuentes de energía renovable está estimulando y estimulará la creación de empleos y puestos de trabajo, y generará nuevas oportunidades en la cadena de valor de un sector que demanda mano de obra calificada para la instalación, mantenimiento y distribución de energía limpia.
Según el Reporte Anual de Energía y Trabajo 2022 de la OIT, para ese año se generaron a nivel mundial 12.7 millones de puestos de trabajos en el campo de la energía renovable, 700,000 empleos extra desde 2021. Solamente en los países angloparlantes del Caribe se van a necesitar cerca de 2,700 profesionales de la energía renovable por año para que puedan alcanzar sus objetivos nacionales de energía limpia.
El uso consciente de materias primas y de los recursos naturales
Los trabajos verdes tienen como foco utilizar eficientemente los recursos naturales a través de prácticas climáticamente inteligentes, que reduzcan la emisión de gases de efecto invernadero.
Esto supone, entre otras cosas, la necesidad de capacitar y equipar con habilidades verdes a, por ejemplo, los agricultores para que implementen prácticas ecológicas y alineadas con el desarrollo sostenible.
La reducción de la contaminación y/o gestión de residuos
En cuanto a la reducción y gestión de residuos, los empleos verdes se enfocan en redirigir el modelo de producción y los comportamientos de consumo hacia una economía circular para disminuir los niveles de residuos. Es decir, dirigir los esfuerzos hacia la reparación, reutilización y el reciclaje de los materiales y productos ya existentes para darles una nueva utilidad.
Reducir las emisiones de gases de efecto invernadero
Los gases de efecto invernadero se encuentran de manera natural en la atmósfera y ayudan a retener el calor que proviene del sol, no obstante, las actividades y malas prácticas humanas hacen que el volumen de estos gases aumente exponencialmente, incrementando la temperatura en la tierra. La promoción de empleos verdes contribuye a disminuir y contrarrestar actividades como la deforestación, la ganadería masiva, y el uso de fertilizantes con nitrógeno que terminen por aumentar el efecto invernadero. Buscan descarbonizar la economía y evitar la contaminación.
Transición justa y empleos verdes: una transformación inevitable
La transición hacia las cero emisiones netas tiene distintas rutas para cada sector económico. Para los países de la región, la forma de lograr que los beneficios y costos de la transición verde se distribuyan de manera equitativa es emprendiendo un proceso transformador, ordenado y socialmente inclusivo que considere sus desafíos estructurales e históricos de desigualdad, informalidad laboral y pobreza.
¿Qué es una transición justa?
Ante la transformación de la economía en la acción frente al cambio climático, los sectores productivos experimentan cambios, tanto en los patrones de producción como en los de consumo y, por tanto, en el mercado laboral y en los medios de vida de las personas. Cuando hablamos de una transición justa, nos referimos al objetivo de garantizar que los cambios se hagan de manera equitativa, mitigando los impactos negativos que puede causar esta transformación, y acompañando a las personas ante el riesgo de perder su empleo y sustento.
Una transición justa debe introducir políticas públicas de empleo y protección social dirigidas a reducir y compensar los impactos negativos, especialmente para los hogares de bajos ingresos. Debe también crear empleos de calidad, con beneficios y con un salario suficiente para superar la pobreza. Esto requiere promover el desarrollo de habilidades y el fortalecimiento de servicios públicos de empleo para ayudar a las personas a acceder a estos empleos.
Sectores económicos con empleos verdes y en transición hacia economías verdes
La transición hacia economías verdes y sustentables traerá consigo un cambio en los mercados laborales y en los empleos y sectores ya existentes. Hoy en día en América Latina y el Caribe los sectores de electricidad, gas y agua, transporte y almacenamiento y comercio, son los que tienen mayor participación de empleo verde directo respecto de otros sectores. Sin embargo, hay otros sectores económicos clave en la región que se están transformando de manera decidida.
Sectores en transformación en la ruta hacia las cero emisiones netas
- Agricultura: este sector es una de las fuentes principales de emisión de gases de efecto invernadero y de degradación ambiental. No obstante, de acuerdo a la Organización de Alimento y Agricultura de las Naciones Unidas, el sector agricultor mundial se abrirá paso hacia la transformación mediante prácticas amigables con el medio ambiente. El objetivo para este sector es mejorar los rendimientos, adoptar prácticas climáticamente inteligentes y reducir la huella de carbono de las dietas humanas. En América Latina y el Caribe, este objetivo requerirá el desarrollo de habilidades para los agricultores, para que puedan mejorar el uso de fertilizantes, adoptar prácticas agrícolas que aumenten el rendimiento por metro cuadrado, introducir prácticas agrícolas climáticamente inteligentes, como la agricultura orgánica, y desarrollar nuevas tecnologías para, por ejemplo, reducir las emisiones de metano provenientes del ganado.
- Transporte: el camino hacia métodos de transporte bajos en emisiones de carbono también está creando nuevos empleos. La transformación de este sector apuntará entre otras cosas a reducir el número de viajes en vehículos privados, cambiar los viajes al transporte público, y mejorar la eficiencia energética y el uso de tecnología de vehículos con energía alternativa y limpia. Esto va a requerir el desarrollo de una fuerza laboral con habilidades para industrias relacionadas con el transporte sostenible.
- Gestión de residuos: la transformación de este sector apunta a cambiar el modelo de producción y consumo en todos los sectores de la economía para reducir y gestionar mejor la cantidad de residuos que se generan. Esto dará paso hacia la economía circular, y la reutilización o reciclaje de residuos generará una cadena de valor y de empleos verdes.
- Energía: en cuanto a este sector, si bien es cierto será uno de los más afectados por la transición, también tiene el potencial para crear numerosos empleos en el campo de las energías renovables. Se espera una disminución de la demanda de trabajo e inversiones en el sector de combustibles fósiles, y esto resultará en desempleo y pérdida de ingresos. Al mismo tiempo, habrá un aumento en la demanda en la generación, mantenimiento y distribución de energía renovable (solar, eólica o hidrógeno verde), lo que generará demanda de inversiones y trabajadores calificados.
¿Cuáles son algunos tipos de empleos verdes?
En el marco de las transformaciones de sectores económicos que están en transición hacia las cero emisiones netas, a continuación, una lista ilustrativa de empleos y ocupaciones verdes que pueden surgir en los mercados laborales de hoy.
- Consultor de energía solar
- Mecánico de automóviles híbridos y eléctricos
- Instalador y mantenimiento de paneles solares /Técnico solar
- Gerente ambiental
- Oficial de sustentabilidad
- Ingeniero en diseño sustentable de edificaciones
- Ingeniero medioambiental
- Agricultor ecológico o asesor de huertos urbanos
- Especialista en reciclaje
- Plomero ecológico
- Operador de transportes ecológicos
¿Y cuáles son algunas habilidades para trabajar en un empleo verde?
Estas nuevas oportunidades laborales representan desafíos y demandan nuevas habilidades específicas. A continuación, mencionamos algunos ejemplos:
- Habilidades de emprendimiento para la economía circular
- Habilidades digitales y para adoptar y aplicar nuevas tecnologías
- Habilidades técnicas para instalar y mantener equipos electrificados y paneles solares.
- Habilidades para construir o adaptar edificios para conservar energía
- Técnicas de riego eficiente
- Reciclaje
- Electromecánica
- Conocimiento de materiales para la protección del medioambiente
- Servicios ambientales
- Logística para reducir la pérdida de alimentos que se produce en traslado desde los centros de producción hacia los destinos de comercio
Acciones para promover empleos verdes y una transición justa en América Latina y el Caribe
Desde el Banco Interamericano de Desarrollo proponemos algunos principios para asegurar transiciones justas en los países de nuestra región que permitan alcanzar el desarrollo económico y sostenible en la transición hacia la economía verde.
- Como mencionamos antes, esta transición para ser realmente justa debe crear empleos de calidad con beneficios y salarios que permitan a las personas superar la pobreza y vivir dignamente.
- Debe también promover el desarrollo continuo de habilidades para que ningún trabajador o trabajadora se quede atrás. Esto incluye:
- Programas de formación que permitan a la fuerza laboral actual y futura mejorar sus habilidades
- Programas de formación que permitan a la fuerza laboral actual aplicar las habilidades que ya poseen en nuevos entornos de trabajo
- Apoyar la formación en el trabajo o en instalaciones específicas de formación ocupacional para aumentar la experiencia práctica y la empleabilidad de los trabajadores en la transición
- Garantizar acceso equitativo a oportunidades de capacitación y desarrollo de habilidades
- Proporcionar formación en habilidades verdes con una perspectiva de género
- Es fundamental introducir o fortalecer los servicios públicos de empleo, pues cumplen un rol fundamental de intermediación entre vacantes y talento disponible. También proporcionan acceso a formación para los empleos verdes o “verderizados”
- Los subsidios salariales a aquellas empresas que contraten a personas de grupos vulnerables a sufrir los mayores impactos durante la transición.
- Proteger los ingresos y el consumo de aquellas personas que pueden potencialmente perder su puesto por la transición a través de seguros de desempleo y esquemas de transferencias monetarias no contributivas
Fuente: BID