Ecuador gana cuncurso de Biofabricas a nivel internacional
REDACCIÓN NOTI-AMÉRICA (ECUADOR)
«Biofábricas de fertilizantes orgánicos al granel para enfrentar la crisis alimentaria en Ecuador» fue el proyecto ganador del Segundo Concurso Regional Soluciones Tecnológicas de Bajo Costo y/o basadas en recursos locales, organizado por la FAO en América Latina.
La Plataforma de Acción Climática en Agricultura de Latinoamérica y el Caribe (PLACA) eligió a los 3 proyectos ganadores de entre 119 propuestas recibidas de 19 países de la región, indicó la FAO, el organismo mundial más importante para de desarrollo de políticas alimentarias.
Este concurso está dirigido a todos los países de América Latina y El Caribe y nació el año 2022 con el fin de conocer las soluciones tecnológicas que se estaban trabajando en la región a nivel de agricultura y ganadería en un contexto de adaptación y mitigación al cambio climático. Su principal característica es que fueran de bajo costo o que estuvieran basadas en recursos locales de las comunidades.
En esta versión, las propuestas fueron evaluadas por un jurado de 35 personas de 11 países, las que componen un equipo multidisciplinario de expertos internacionales. Esta evaluación se dio en la modalidad de «dobles pares ciegos»; es decir, que los participantes y los miembros del jurado no se conocen.
El ecuatoriano Richard Intriago, quien es PhD en Agroecología y ganador del concurso, señaló que este proyecto ha beneficiado a miles de familias de los sectores rurales del país, que enfrentaron el alto precio de la urea y la crisis alimentaria global. Otro aspecto relevante de este proyecto es que está al alcance de los agricultores, quienes pueden instalar su propia biofábrica.
Las entidades públicas, organizaciones no gubernamentales o gremios podrían hacer uso de esta poderosa herramienta para mejorar la productividad, disminuir el ataque de plagas y enfermedades y hasta los efectos de cambio de clima en la agricultura.
Los tres productos de las Biofábricas, son salvadores para los pequeños y medianos campesinos, especialmente, ya que estos agricultores no tienen los recursos suficientes para invertir en fertilizantes químicos convencionales que están sujetos a fluctuaciones constantes de precio. Reemplazan en un 50 % a los productos convencionales, al complementar la fertilización de cualquier cultivo.
«Estos productos de las biofábricas hacen que los microorganismos del suelo comienzan a reactivarse, por lo que mejoran la salud del cultivo a través de una nutrición equilibrada; consecuentemente mejoran la productividad, el peso de los productos, y en el caso de las frutas mejora el sabor», explicó Intriago.