El agua de Pítimas de las Carmelitas: refrescantes y curativas
REDACCIÓN NOTI AMÉRICA (ECUADOR)
Una de las boticas más pintorescas de Cuenca (y posiblemente del Ecuador), es la que se encuentra junto a la famosa “Plaza de las Flores” y en la que se expende una gran variedad de productos caseros con propiedades medicinales elaborados por las monjas Carmelitas.
La Plaza de las Flores es uno de los sitios más emblemáticos de Cuenca, ya que además de ser visualmente hermoso, constituye el atrio de la iglesia del Carmen de la Asunción, uno de los edificios patrimoniales más importantes de la ciudad. Aquí se encuentra también el acceso al convento carmelitano, en donde las religiosas de claustro elaboran con especial esmero vino reconstituyente, jarabe de rábano, bebidas multivitamínicas, miel de abeja, lociones para dolores musculares, cremas para combatir problemas de la piel y por supuesto, la súper popular “agua de pítimas”. Estos productos se expenden al público a través del torno del convento o en dos locales ubicados junto a la entrada.
El agua de pítimas es una bebida que se elabora desde hace mucho tiempo en el convento del Carmen de la Asunción, en donde las religiosas cultivan sus propios huertos repletos de plantas y hierbas medicinales. Su tradición de elaborar infusiones de todo tipo, las llevó a inventar esta peculiar bebida preparada con pétalos de rosas y claveles, valeriana, hierba luisa, cedrón y otras hierbas. Al descubrir que la misma tenía excelentes propiedades medicinales y era además deliciosa y refrescante, decidieron empezar a venderla al público hace más de 70 años.
Desde su inicio, la venta del agua de pítimas fue un éxito total. De hecho su nombre, proviene de la palabra quichua “piti” que significa “poco” y de la palabra “más”. Es decir, “un poco más”, pues la gente siempre así lo pedía. Hoy en día decenas de personas llegan hasta el pequeño local junto a la entrada del convento para comprar su bebida favorita. Esta es posiblemente una de las cosas que más llaman la atención de quienes visitan la “Plaza de Flores”
Por sus componentes, el agua de pítimas tiene propiedades tónicas, diaforéticas, febrífugas y calmantes. Las religiosas aseguran que también es buena para las afecciones de los riñones y para normalizar las menstruaciones.
Cuando visites Cuenca, no olvides conocer la hermosa “Plaza de Flores” y descubrir sus secretos, entre los que se cuentan los deliciosos y curativos productos de las monjas carmelitas.