Kits de conectividad reciben niños y jóvenes en situación de «movilidad humana»
REDACCIÓN NOTI AMÉRICA (ECUADOR)
Con el aporte de UNESCO, UNICEF, ACNUR, ONU, Education Cannot Wait -ECW y el Ministerio de Educación, familias ecuatorianas y venezolanas se ven beneficiadas con 230 kits de conectividad y 40 tablets.
Este programa multianual de resiliencia para la inclusión educativa-MYRP, busca asegurar que los niños, niñas y adolescentes en situación de movilidad humana accedan al sistema educativo, aprendan y prosperen.
El acto de entrega de los equipos tecnológicos se desarrolló en las instalaciones de la Unidad Educativa Ileana Espinel y contó con la presencia de la subsecretaria de Educación, Yadira Blakman y de los delegados de cada una de las organizaciones no gubernamentales.
Este programa se implementa en 50 instituciones educativas a nivel nacional, en cinco provincias; Guayas, Pichincha, Imbabura, Manabí y Azuay. En cada provincia se está trabajando con diez establecimientos.
Guayas recibió 139 kits para personas en situación de movilidad humana, así también se entregaron 11 tablets a personas ecuatorianas y 29 tablets a venezolanas.
“Deseamos que estas herramientas sean un motor y refuerzo para que nuestros estudiantes culminen con sus estudios, que sean grandes profesionales, que no exista el abandono escolar, que cumplan con sus metas y que en un futuro aporten de manera positiva a nuestra sociedad”, acotó Yadira Blakman, subsecretaria de educación.
Carolina Miño, coordinadora General del Programa Multianual de Resilencia de UNESCO – Quito, dijo que “este programa en realidad pretende llegar a todas las personas que estén en posición de vulnerabilidad, personas en situación de movilidad humana, con discapacidad o comunidades de acogida”.
El plan cuenta con financiamiento del fondo Education Cannot Wait (La educación no puede esperar), tiene una proyección de implementación hasta el 2023 y su meta es alcanzar a por lo menos 105.000 niñas, niños y adolescentes, del sistema educativo nacional. La selección de los beneficiarios se realizó sobre un análisis de priorización de necesidades en función de la vulnerabilidad de las familias.