Las mujeres millonarias aman la filantropía, pero ¡no financian mujeres!
REDACCIÓN NOTI AMÉRICA (ECUADOR)
Kay Koplovitz y Alli McCartney quieren que las mujeres inviertan más en proyectos liderados por sus colegas. ¡Te contamos cómo lo harán!
Durante años se ha compartido la idea de que las mujeres no debemos apoyarnos ni mucho menos estar unidas. Esto ha fomentado que aquellas que se encuentran en un nivel socioeconómico alto y con la capacidad de invertir en proyectos de emprendimiento, raramente se interesen por esas iniciativas y proyectos liderados por sus colegas.
De acuerdo con Marcela Lagarde —política, académica, antropóloga e investigadora mexicana especializada en etnología— tenemos que desarrollar una gran sororidad entre las mujeres, una ética de apoyo y de no traición, de no exclusión y una ética en donde este el respeto por otra mujer.
Aunque no es la única que comparte esta ideología, ya que para Kay Koplovitz y Alli McCartney, defensoras del empoderamiento financiero femenino…
Las mujeres no pueden pedir que las tomen en cuenta allá afuera, si primero no lo hacen entre ellas.
Esto las motivó a indagar sobre cómo lograr que más mujeres de alto patrimonio neto inviertan en fundadoras y rompan con estos prejuicios que han impedido el crecimiento del empoderamiento financiero femenino.
¡No financian mujeres! Pero deberían…
De acuerdo con las especialistas mencionadas, a la fecha no hay suficientes mujeres invirtiendo en mujeres:
El año pasado, más de $ 450 mil millones han sido donados por estadounidenses en filantropía, y las mujeres son una gran parte de ello. Ellas dan una enorme cantidad y tienen cosas en las que creen, pero también pueden invertir en misiones y valores que aprecian.
Kay Koplovitz y Alli McCartney.
Esto despertó en Kay Koplovitz y Alli McCartney la necesidad de construir Springboard Enterprises en 2000, una red que motive a dar apoyo a este tipo de empresas lideradas por mujeres.
Por medio de esta red, ellas se encargan de enseñar a otras mujeres las primeras etapas para aprender cómo comenzar a invertir en otros tipos de proyectos alineados a sus valores y que impulsen la equidad de género.
Creo que esta es una forma en que las mujeres pueden pensar en alinear sus inversiones con sus intereses filantrópicos. Hay muchas mujeres interesadas en productos y servicios sostenibles.
Kay Koplovitz y Alli McCartney.
En Springboard Growth Capital, se invirtió en empresas de consignación en línea como en The RealReal en 2016 con el que se realizaron cuatro inversiones antes de que saliera a bolsa en 2019, y fue una gran oportunidad para que las mujeres invirtieran en algo que aman, la sostenibilidad y el lujo.
De acuerdo con Alli McCartney, se han dado a la tarea de leer todas las investigaciones sobre el poder del bolsillo y la demografía de este país, en términos de:
- Edad.
- Riqueza.
- Educación.
Y de manera abrumadora, encontraron que las mujeres no cuentan con el apoyo e ingreso suficiente para poner en marcha sus empresas.
Para solucionar esto, se requiere buscar el capital inicial que representa el punto de partida para igualar este acceso, ya que todavía estamos hablando de un mundo dominado por los hombres en términos de quién desempeña el papel de proporcionar el capital.
Mi primer trabajo fue administrar dinero para los empleados de Lehman Brothers, y lo que inevitablemente sucedió fue que la conversación sobre invertir dinero es a menudo de lo que los hombres hablan con sus pares en la mesa de operaciones, mientras juegan al golf. Para las mujeres, es más apropiado o socialmente aceptable hablar sobre dónde está dando dinero, en lugar de dónde está invirtiendo dinero.
Alli McCartney.
Todos estos datos se recopilan en investigaciones como Own Your Worth, en donde se muestra esta enorme brecha, donde las mujeres dan fe de no sentirse cómodas o lo suficientemente informadas para tomar decisiones de inversión.
¿Es un riesgo invertir en ellas?
A pesar de que existen mujeres de alto poder adquisitivo que no tienen problemas para emitir un cheque por $500,000 para una organización benéfica, cuando se trata de invertir en un proyecto liderado por mujeres, prefieren pensarlo dos veces antes de hacerlo.
Para Alli McCartneye, eso se debe a los mecanismos de incentivos integrados en nuestra sociedad:
La filantropía es buena y te dan una palmadita en la cabeza y una estrella de oro y elogios sociales. Con la inversión, se juzga por el éxito que tiene, y tal vez no sea recompensado por haber asumido el riesgo.
Alli McCartney.
Por su parte, Kay Koplovitz dice que actualmente hemos alcanzado este hito de un billón de dólares en inversiones socialmente responsables.
Creo que estas dos cosas que solíamos considerar muy diferentes, la filantropía y la inversión con fines de lucro, se están uniendo cada vez más.
Kay Koplovitz.
Esto aumentó la esperanza de Koplovitz en que se pueda tener este proceso mediante el cual las mujeres invierten en cosas que pueden ayudar a construir y apoyar.
Luego toda esta inversión podrá ser remunerada y pueden usar capital monetario como capital social, y en la medida en que tengan más, entonces simplemente invierten más y más.
La importancia de invertir en ellas
Si una mujer está en el equipo de inversión de una empresa de capital riesgo, esa empresa tiene un 70% más de probabilidades de invertir en una empresa dirigida por mujeres.
Las mujeres inversionistas son más propensas a seleccionar empresas dirigidas por mujeres porque son promovidas por más mujeres.
Por su parte, las mujeres fundadoras quieren al menos una oportunidad para contar sus historias. Es importante destacar que las mujeres pueden tener más conocimientos que los hombres sobre el producto de una empresa, especialmente en la economía digital.
Esto porque las mujeres toman casi el 80% de las decisiones o donde las empresas están abordando problemas u oportunidades dirigidas a las mujeres.
Las mujeres que son inversionistas pueden ser excelentes conectores para las oportunidades comerciales, especialmente en sectores en los que tienen experiencia, actúan como embajadoras o de alguna manera promueven la empresa a otros.
Y con ello impulsar “el boca a boca”, una herramienta de marketing muy poderosa. A las mujeres les gustaría que otras mujeres se beneficiaran de su inversión en su empresa.
¿Los hombres pueden participar?
Ellas comparten que frecuentemente la gente quiere saber:
¿Por qué solo mujeres y por qué no hombres?
Es muy fácil de explicar porque hay una diferencia entre los dólares de inversión que obtienen los hombres y los dólares de inversión que obtienen las mujeres.
Hasta que se cierre esa brecha, seguiremos apoyando a las mujeres. Las mujeres son una clase de activos con financiación insuficiente y potencialmente con un rendimiento excesivo.
Kay Koplovitz.
Como en el caso de Kay, quien comenzó ayudando a las mujeres en tecnología porque eso es lo que sabía. Y se ha expandido durante muchos años.
Las inversiones que ha hecho son en tecnología financiera, moda, cuidado del cabello y productos de consumo porque puede tener agallas ahí.
Tengo un impulso de ego. Entonces puedo tomar lo que he aprendido y aplicarlo para ayudar a un cliente, o llevarlo a otra empresa en la que invierto. Puede ser una experiencia muy edificante y económicamente gratificante.
Kay Koplovitz.
Al crear un espacio para invertir en ellas, no solo están buscando romper con esta brecha de genero, también buscan expandir este conocimiento a más mujeres y sobre todo a las que tienen el poder adquisitivo de contribuir a colocar a más mujeres dentro del mercado empresarial.
Fuente: EXPOK