La inclusión ciudadana crea ciudades más inteligentes
REDACCIÓN NOTI-AMÉRICA (ECUADOR).
La inclusión ciudadana puede aportar áreas de oportunidad para formar ciudades sostenibles.
La industria de la construcción está apostando por la creación de ciudades más inteligentes pero si quieren que realmente lo sean, deben realizar una inclusión ciudadana. Solo así conocerán las verdaderas necesidades de sus habitantes y las áreas de oportunidad que tienen para tomar mejores decisiones.
Inclusión ciudadana… Por favor
Arquitectos, ingenieros e incluso el gobierno están diseñando y proponiendo estrategias que permitan transformar las ciudades en unas más verdes y sostenibles. Dentro de estos proyectos se encuentra la idea de integrar asfalto inteligente y fuentes de energía renovable, así como carreteras con ciclovía, entre otras cosas pero, ¿realmente es lo que necesitan los habitantes de estas urbes?
En realidad no lo sabrán hasta que se realice una inclusión ciudadana en la que las personas puedan compartir las deficiencias y áreas de oportunidad que se tienen.
En el caso de los residentes de Barcelona, se abrió una convocatoria en la que tuvieron la oportunidad de compartir su posición con respecto a la remodelación de espacios verdes de Montjuic, una colina icónica que domina la capital catalana. Al hacer esta inclusión, los líderes de este tipo de proyectos pueden verificar si sus proyectos serán funcionales o no y qué es lo que les hace falta incluir.
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Por su parte, los habitantes no solo verificaron el proyecto, también pudieron aportar más a la iniciativa de Montjuic, sobre cosas, como el transporte y la protección del medio ambiente.
Ellos saben más…
Este tipo de inclusión ciudadana es muy frecuente en Barcelona porque no solo le ayuda al gobierno e involucrados a conocer la opinión de las personas, también pueden recopilar información sobre otros proyectos municipales. Además se ha comprobado que los ciudadanos quieren involucrarse con los proyectos que se planean implementar en la ciudad.
De acuerdo con los expertos, los países y ciudades que tienen prácticas legislativas muy establecidas y basadas en reglas, la innovación puede ser difícil en contraste con los países con instituciones democráticas más jóvenes. En cambio, en los lugares en los que se implementan prácticas inclusivas, se puede innovar más rápidamente e integrar proyectos que permitan transformar las ciudades en unas más sostenibles e inteligentes.
Internet el mejor aliado
Los procesos participativos están surgiendo gradualmente en ciudades de todo el mundo. Esto gracias a que el Internet se ha vuelto un poderoso aliado y una plataforma sencilla en la que se puede subir las diferentes consultas sobre los proyectos.
Un ejemplo fue la iniciativa que impulsó el Senado de Berlín en la que abordó iniciativas enfocadas en mejorar la calidad de vida de los refugiados. Este proyecto surgió posterior a que en 2015, la ciudad recibió un gran número de refugiados y el gobierno y habitantes no pudieron ofrecer la ayuda necesaria.
Para lograr el éxito de esta consulta, el gobierno de Berlín involucró a las ONG y otras organizaciones que se encargan de tener contacto con migrantes y así fomentar su correcta participación en la consulta.
“La meta era infundir su conocimiento y comprensión de las necesidades de los refugiados en el programa de la ciudad”, señaló Birgit zur Nieden, un comisionado en el Senado de Berlín La inclusión ciudadana, también permite conocer el enfoque y punto de vista de las nuevas generaciones, así como sus necesidades.
Borde Juvenil
Para Beth Noveck, directora del Governance Lab en la Universidad de Nueva York, aprovechar la nueva tecnología para involucrar a los jóvenes y al público en general en la redacción de leyes y en consultas ciudadanos será un fenómeno global. Y decidió citar como ejemplo a Taiwán, en donde una empresa de tecnología involucró a más de 200,000 personas en la elaboración de una legislación sobre los requisitos de los accionistas de la empresa y las ventas de alcohol por Internet.
Para hacerlo se utilizó una herramienta de código abierta llamada “Polis!”, esta permite monitorear el comportamiento de un gran grupo utilizando un algoritmo que agrupa sus respuestas.
Beth Noveck señala que realizar estas consultas permite que el gobierno, empresas y organizaciones conozcan las opiniones de los ciudadanos sobre temas clave, como la política ambiental, los impuestos, la democracia y los servicios públicos.
Mayor transparencia
A lo largo de CrowdLaw Catalog, se menciona que cualquier gobierno que quiera poner en marcha este tipo de iniciativas, también debe comprometerse con la transparencia sobre los resultados y las decisiones finales. Los procesos de inclusión ciudadana se están utilizando más porque las personas pueden detectar problemas, identificar soluciones, evaluar leyes que afectan directamente sus vidas diarias y exigir mayor transparencia.
“Si bien el nivel de interés público siempre depende del tema, estamos llegando a un punto en que estos procesos participativos ya no dependen de la voluntad del gobierno”, agregó. De acuerdo con CrowdLaw Catalog, dirigido por Governance Lab, el nivel de interés del público estará en aumento durante los próximos años porque las personas quieren vivir en ciudades inteligentes y sostenibles.
Fuente: Expok
