ONU consagra derechos de los Campesinos, Rurales y pueblos Indígenas
REDACCIÓN NOTI-AMÉRICA (ECUADOR)
La FAO ha expresado su satisfacción por una histórica resolución de la Asamblea General de las Naciones Unidas que adopta la Declaración sobre los derechos de los campesinos y otras personas que trabajan en las zonas rurales.
La Declaración, que la Asamblea General aprobó el 17 de diciembre de 2018, tiene como objetivo proteger los derechos de todas las poblaciones rurales, incluidos los campesinos, los trabajadores agrícolas y rurales y los pueblos indígenas, al tiempo que reconoce su contribución al desarrollo sostenible y la biodiversidad y los desafíos a lo que se enfrentan.
«La FAO aplaude la adopción de la declaración. A la población rural se le ha dejado atrás de forma sistemática: constituye la gran mayoría de los pobres del mundo, generalmente tienen salarios más bajos y menos acceso al agua, energía, protección social y otros servicios que son esenciales para su desarrollo sostenible. Esta es una oportunidad para cambiar esta realidad», aseguró Carla Mucavi, Directora de la Oficina de Enlace de la FAO para las Naciones Unidas en Nueva York.
Los derechos específicos reconocidos por la Declaración incluyen el derecho a una alimentación adecuada, a la tierra y al agua. La Declaración sostiene también la necesidad de respetar la identidad cultural y el conocimiento tradicional de la población rural, así como la exigencia de proporcionar protección social y garantizar la igualdad de género en las zonas rurales.
La adopción de la Declaración es la culminación de un proceso negociador inclusivo que se prolongó durante seis años, liderado por Bolivia. La FAO ha apoyado este proceso para la adopción la Declaración, que está vinculada a la mayoría de los principios y directrices adoptados por el Comité de Seguridad Alimentaria Mundial y varios órganos de la FAO.
En particular, la Declaración hace referencia a las Directrices voluntarias sobre la gobernanza responsable de la tenencia de la tierra, la pesca y los bosques en el contexto de la seguridad alimentaria nacional y otros acuerdos a nivel mundial como el Tratado internacional sobre los recursos fitogenéticos para la alimentación y la agricultura. Los temas y valores que sustentan la Declaración se relacionan además con otros aspectos del trabajo de la FAO, incluyendo los pueblos indígenas.
Sin dejar a nadie atrás
Existen cada vez más evidencias que indican que la población en las áreas rurales sufre de manera desproporcionada el hambre y la pobreza. A nivel mundial, la tasa de pobreza en las áreas rurales es más del triple que en las áreas urbanas, y en las áreas rurales vive más de la mitad de la población mundial y el 79 por ciento del total de los pobres, según un informe reciente del Banco Mundial. El 70 por ciento de los 2 000 millones de personas en el mundo sin servicios de saneamiento básico residen en áreas rurales y la tasa de acceso a la energía en estas áreas rurales es de cerca del 75 por ciento, en comparación con el 96 por ciento en las áreas urbanas.
Según el Informe del Relator Especial sobre el Derecho a la alimentación presentado en el 73º período de sesiones de la Asamblea General, tan solo un 20 por ciento de los trabajadores agrícolas tienen acceso a protección social básica, y sus salarios son por lo general bajos, se pagan tarde y no se van ajustando de manera periódica.
Se espera igualmente que la Declaración tenga un impacto positivo en los medios de vida de los agricultores familiares, que producen más del 70 por ciento de los alimentos del planeta y más del 80 por ciento en los países en desarrollo, en términos de valor. La FAO aporta conocimientos y recursos a sus países miembros en apoyo del Decenio de las Naciones Unidas de Acción sobre la Nutrición y del Decenio de las Naciones Unidas para la Agricultura Familiar, que hacen hincapié en la centralidad de los campesinos, pequeños pescadores y pastores para lograr sistemas alimentarios sostenibles que permitan una alimentación saludable para toda la población.