¿Se necesita un milagro económico para evitar la crisis?
REDACCIÓN NOTI-AMÉRICA (ECUADOR)
Las recientes declaraciones sustentadas por Patricio Alarcón, Presidente de la Cámara de Comercio de Quito ha disparado las alarmas entre los actores económicos del Ecuador, su grave denuncia apunta a que la deuda real del país superarían los USD92 mil millones, con un tamaño de economía de apenas USD 100 mil millones, por lo que el país estaría virtual, literal y realmente quebrado.
En una reciente entrevista del Presidente Lenín Moreno a CNN en Chile, confesó que tiene la sensación de que el anterior Gobierno de Rafael Correa Delgado, hizo las cosas exprofesamente mal, para que el próximo gobernante, que creían iba a ser el opositor Guillermo Lasso fracase. No obstante a pesar de conocer la realidad del país, Lenín Moreno no termina de tomar decisiones en el campo económico, más bien sigue la misma línea de Correa y hasta recicla funcionarios de ese gobierno, como el caso de la «nueva» Ministra de Finanzas, Elsa Viteri, cuyo nombramiento incremento el riesgo país y en consecuencia subieron las tasas de interés para préstamos al Ecuador, además de desvalorizarse los bonos soberanos del país en el mercado internacional.
La Ministra Viteri es «famosa» por haber declarado el «default» (incapacidad de pago) la deuda ecuatoriana en el 2008 perjudicando a los compradores del papel. En los círculos financieros ecuatorianos se rumora que el haberla nombrado Ministra correspondería a una estrategia para salir de la dolarización, pues si el país en algún momento no pudiera cumplir con sus obligaciones, lo cual no estaría lejos de ocurrir, por su muy abultada deuda, otra declaratoria de «default» provocaría una estampida de retiro o corrida de dinero de los bancos de parte del público que no lo pararía nadie, por que ni el Gobierno tendría los recursos para afrontarlos y el Banco Central que por ley ya no es banco de última instancia, ocasionaría que la dolarización se termine, regresando un «Sucre» inorgánico ( sin sustento de valor) con devaluaciones e hiperinflación que estarían a la orden del día.
Pulverizando la capacidad adquisitiva de los ecuatorianos, sometiendo a toda la sociedad a la pobreza extrema, muy al estilo de la receta del Socialismo del Siglo XXI. Así las cosas, ahora sí se requiere de un verdadero _»milagro ecuatoriano»_ para que este maravilloso país puede salvarse de un colapso total, al estilo venezolano. Esperemos que esto no ocurra, por el bien de todos.
Por Raúl Andrade *Grupo: ENCUENTRO NACIONAL