¿DEFINICIÓN DE RUMBOS O LA CONTINUIDAD DEL MODELO POLÍTICO? Por Vicente Brito
VENEZUELA | NOTI-AMERICA.COM
¿DEFINICIÓN DE RUMBOS O LA CONTINUIDAD DEL MODELO POLÍTICO?
La nación Venezolana está entrando en una de sus coyunturas políticas más complejas y de mayor trascendencia para sus ciudadanos. Lo podemos observar en donde los que ejercen el poder definen rumbos, pero sus decisiones tomadas en las últimas semanas nos indican que lo que establecen es la continuidad del modelo político, así lo indican distintos voceros de los que conforman la Asamblea Nacional y otros integrantes del bloque oficialista donde hablan del estado comunal como la panacea a la multiplicidad de problemas que aquejan a la nación. Lo cual nos indica una continuidad más radical del modelo político que ha definido el rumbo de la nación en estos 21 años, donde las decisiones tomadas han sido orientadas en obtener y concentrar más poder por parte del estado, resultando que ellas son antagónicas y siempre limitativas de los derechos ciudadanos.
Hemos observado los distintos llamados a participar en las convocatorias realizadas por actores oficiales, hacia distintos sectores de la sociedad civil que incluye a sindicatos, instituciones académicas, gremios empresariales, entre otros, para promover un diálogo que busca soluciones a la crisis que nos agobia, la cual ha sido causada principalmente por la aplicación de políticas públicas que nos han conducido a la compleja situación en la cual nos encontramos. Ya han transcurrido algunas semanas de esos intercambio de opiniones y propuestas, sin que se hayan logrado a la fecha, algunos resultados que nos indiquen algún tipo de soluciones a la complejidad que afecta a la sociedad Venezolana en su conjunto.
Diversos anuncios indican que a través de la ley antibloqueo, se realizan negociaciones con inversionistas privados internacionales para ceder el control de empresas estatizadas que no están funcionando adecuadamente, se habla que son decenas las que están siendo ofrecidas a estos grupos interesados, hasta el momento no se observa una destacada participación de inversionistas nacionales en tales negociaciones o asociados con estos grupos internacionales. Lo cual solo significa que esas empresas a las cuales se les cedan a estos grupos de inversores tienen como objetivo mejorar su producción y ya dejen de ser una carga financiera para el Banco Central, que es el organismo responsable de proveer el dinero, vía pagarés para cubrir las inmensas pérdidas del conglomerado empresarial público. Este sostenimiento financiero por el BCV es el causante de la hiperinflación que empuja hacia arriba el costo de vida y afecta el consumo de las familias.
Pero lo que observamos en esta radicalización del modelo político es que no existe ninguna disposición para cumplir con las expectativas creadas, a las solicitudes expresadas públicamente por distintos voceros de esa sociedad civil al cual se convoca, al no ser consideradas o simplemente son echadas en saco roto. Tales como la devolución de las empresas, haciendas, hatos y fincas tomadas sin ningún pago a sus propietarios privados. Los constantes pedimentos de las asociaciones de productores de que se les doten de los insumos necesarios para la activación de la producción nacional la cual se encuentra en sus mínimos históricos de los últimos 120 años. Garantizar la seguridad jurídica y que cesen las invasiones que se siguen produciendo a lo largo y ancho del país, sobre todo en viviendas y fincas. Lo más preocupante es el control por parte del partido oficial de todos los consejos comunales existentes en el país, concentrando todos los recursos públicos asignados para ser invertidos a través de los bancos comunales o cualquier organismo público bajo su tutela, lo cual incluye la totalidad de los planes productivos públicos para mejorar la producción nacional.
Todo lo cual nos indica que no hay definición de rumbos que conlleven a una modificación del modelo, sino lo que se observa es una radicalización del mismo, sostenido en el poder comunal donde el estado se convierte en el que todo lo puede y hace.
Vicente Brito
Presidente
Red por la defensa al Trabajo,
la Propiedad y la Constitución.