Oliver Schütte, el creador de la multi-premiada Casa Sin Huella, llega a Colombia
NOTI-AMERICA | COLOMBIA
El arquitecto alemán, cofundador y director de la oficina transdisciplinaria A-01 (A Company / A Foundation), llega a Colombia para hablar de cómo la innovación hace parte de un proceso sostenible para crear la “Casa Sin Huella (CSH)”. La “CSH” se basa en un sistema modular que ofrece diferentes tipologías de viviendas descarbonizadas. El proyecto ganó 28 premios internacionales y se basa en un concepto adaptativo que se puede aplicar en diferentes regiones y zonas climaticas. El prototipo fue construido en Costa Rica y actualmente A-01 está trabajando en la adaptación de este modelo en ese país, así como otras zonas tropicales del mundo. Además, se están desarrollando aplicaciones en diversos contextos urbanos de Centroamérica y Europa. Su aplicación en Colombia, sería un avance en el empeño NetZero del Gobierno Nacional.
Este invitado especial de Construverde, que se realizará del 8 al 9 de junio en el Cubo de Colsubsidio, mostrará toda la innovación que hay detrás de la “Casa Sin Huella”, una construcción que es hoy un referente global de cómo a través del prototipo de la típica vivienda en Costa Rica, se logra ser eficiente, usando elementos locales y desplegando diseño particular que la hace única.
Allí la innovación ha jugado un papel primordial porque es, como lo señala Oliver, un elemento primordial de la sostenibilidad aplicada. “La innovación es la dupla de la sostenibilidad. Para generar lo que llamamos la sostenibilidad integral, incorporamos factores de la tecnología contemporánea, condiciones sociales en terminos de la equidad social, intereses ecológicos para optimizar el desempeño de la construcción en el espacio construido, y sobre todo, determinar cómo se sostiene el proyecto en el tiempo, lo que también implica a la optimización del prototipo en una reproducción serial. Por eso creamos desde mi oficina A-01, prototipos con nuevas ideas que se basan en procesos multi-actor y participativos, que en el caso de la CSH, incluyen representantes de los sectores de diseño y construcción, así como en temas de conservación y desarrollo humano”, argumenta el arquitecto ganador de 28 premios internacionales por su diseño.
¿Qué es la Casa Sin Huella (CSH)?
El primer prototipo fue ubicado en Ojochal, un pequeño poblado en la selva tropical de Costa Rica, en un entorno con un hábitat rico y único donde existen microclimas en medio de un hábitat exuberante, por lo que el diseño es parte de lo que lo rodea, aportando y no afectando su entorno natural.
Todo el diseño parte de un núcleo central de servicios, donde se ubica la maquinaria, inteligencia, armarios, baños, cocina y área de lavado. La estructura principal del prototipo es de acero flotante que contribuye a la eficiencia en términos de montaje y mantenimiento, y desde allí, se desarrolla la estructura y fachada en madera, abrigando dentro del espacio dos habitaciones, sala de estar y comedor combinados, pero también unas áreas multifuncionales entre los espacios privados.
La fachada tiene la ventaja de abrirse o cerrarse por secciones, para aumentar o reducir no solo el flujo de aire, sino también abrir los espacios interiores hacia el entorno circundante, creando una extensión frente a la naturaleza, o si se prefiere, cerrarse, para dar privacidad.
“Es una estructura bioclimática, que permite flujos de aire y luz natural constantes, con una fachada y acabados hechos por madera certificada. Ahora estamos trabajando también en componentes estructurales en madera según nuestro concepto modular. Estos componentes se producen en Costa Rica, que no solo crea economías nuevas y circulares, sino fomenta el desarrollo local sostenible”, recalca el arquitecto Schütte.
Se ha creado una caja de herramientas como si fuera un “Lego” a escala 1:1, se pueden auto-configurar diferentes tipologías de casas con los espacios y materiales sugeridos, según las necesidades, presupuesto y sitio de destino. Por ejemplo, existen diseños de una casa pequeña o “tiny home” (36 m2), mediana (81 m2) y familiar (108 m2). Cada construcción se personaliza a partir de un catálogo de elementos prefabricados y materiales seleccionados, lo que permite un alto nivel de eficiencia, economía, diversificación y personalización.
El prototipo en Costa Rica está conectada a la red pública de energía, lo que se produce por fuentes renovables en este país centroamericano. También se está utilizando un sistema termo solar para el calentamiento de agua. Las configuraciones auto-suficientes están disponibles para ubicaciones fuera de la red, incluida la recolección de aguas pluviales. Incluso, la configuración de las habitaciones puede ser variado por los clientes. Así se genera un alto nivel de optimización personal en base del sistema industrial propuesto.
“Hoy tenemos 15 proyectos en fase de construcción o planeación constructiva, que dan respuesta a una demanda del mercado de países como México, Brasil, Estados Unidos y Canadá. Incluso hay pedidos desde el Sur Este de Asia, donde la Casa Sin Huella es un aporte al tema de un desarrollo integralmente sostenible”, asegura el arquitecto.
Construverde así abre la puerta para que experiencias como la de la “Casa Sin Huella”, se pueda conocer en Colombia, y adaptar prototipos como este proyecto innovador, apoyando el empeño del sector constructor y del Gobierno Nacional, en trabajar por ser carbono cero a 2050.
quitecto alemán, cofundador y director de la oficina transdisciplinaria A-01 (A Company / A Foundation), llega a Colombia para hablar de cómo la innovación hace parte de un proceso sostenible para crear la “Casa Sin Huella (CSH)”. La “CSH” se basa en un sistema modular que ofrece diferentes tipologías de viviendas descarbonizadas. El proyecto ganó 28 premios internacionales y se basa en un concepto adaptativo que se puede aplicar en diferentes regiones y zonas climaticas. El prototipo fue construido en Costa Rica y actualmente A-01 está trabajando en la adaptación de este modelo en ese país, así como otras zonas tropicales del mundo. Además, se están desarrollando aplicaciones en diversos contextos urbanos de Centroamérica y Europa. Su aplicación en Colombia, sería un avance en el empeño NetZero del Gobierno Nacional.
Este invitado especial de Construverde, que se realizará del 8 al 9 de junio en el Cubo de Colsubsidio, mostrará toda la innovación que hay detrás de la “Casa Sin Huella”, una construcción que es hoy un referente global de cómo a través del prototipo de la típica vivienda en Costa Rica, se logra ser eficiente, usando elementos locales y desplegando diseño particular que la hace única.
Allí la innovación ha jugado un papel primordial porque es, como lo señala Oliver, un elemento primordial de la sostenibilidad aplicada. “La innovación es la dupla de la sostenibilidad. Para generar lo que llamamos la sostenibilidad integral, incorporamos factores de la tecnología contemporánea, condiciones sociales en terminos de la equidad social, intereses ecológicos para optimizar el desempeño de la construcción en el espacio construido, y sobre todo, determinar cómo se sostiene el proyecto en el tiempo, lo que también implica a la optimización del prototipo en una reproducción serial. Por eso creamos desde mi oficina A-01, prototipos con nuevas ideas que se basan en procesos multi-actor y participativos, que en el caso de la CSH, incluyen representantes de los sectores de diseño y construcción, así como en temas de conservación y desarrollo humano”, argumenta el arquitecto ganador de 28 premios internacionales por su diseño.
¿Qué es la Casa Sin Huella (CSH)?
El primer prototipo fue ubicado en Ojochal, un pequeño poblado en la selva tropical de Costa Rica, en un entorno con un hábitat rico y único donde existen microclimas en medio de un hábitat exuberante, por lo que el diseño es parte de lo que lo rodea, aportando y no afectando su entorno natural.
Todo el diseño parte de un núcleo central de servicios, donde se ubica la maquinaria, inteligencia, armarios, baños, cocina y área de lavado. La estructura principal del prototipo es de acero flotante que contribuye a la eficiencia en términos de montaje y mantenimiento, y desde allí, se desarrolla la estructura y fachada en madera, abrigando dentro del espacio dos habitaciones, sala de estar y comedor combinados, pero también unas áreas multifuncionales entre los espacios privados.
La fachada tiene la ventaja de abrirse o cerrarse por secciones, para aumentar o reducir no solo el flujo de aire, sino también abrir los espacios interiores hacia el entorno circundante, creando una extensión frente a la naturaleza, o si se prefiere, cerrarse, para dar privacidad.
“Es una estructura bioclimática, que permite flujos de aire y luz natural constantes, con una fachada y acabados hechos por madera certificada. Ahora estamos trabajando también en componentes estructurales en madera según nuestro concepto modular. Estos componentes se producen en Costa Rica, que no solo crea economías nuevas y circulares, sino fomenta el desarrollo local sostenible”, recalca el arquitecto Schütte.
Se ha creado una caja de herramientas como si fuera un “Lego” a escala 1:1, se pueden auto-configurar diferentes tipologías de casas con los espacios y materiales sugeridos, según las necesidades, presupuesto y sitio de destino. Por ejemplo, existen diseños de una casa pequeña o “tiny home” (36 m2), mediana (81 m2) y familiar (108 m2). Cada construcción se personaliza a partir de un catálogo de elementos prefabricados y materiales seleccionados, lo que permite un alto nivel de eficiencia, economía, diversificación y personalización.
El prototipo en Costa Rica está conectada a la red pública de energía, lo que se produce por fuentes renovables en este país centroamericano. También se está utilizando un sistema termo solar para el calentamiento de agua. Las configuraciones auto-suficientes están disponibles para ubicaciones fuera de la red, incluida la recolección de aguas pluviales. Incluso, la configuración de las habitaciones puede ser variado por los clientes. Así se genera un alto nivel de optimización personal en base del sistema industrial propuesto.
“Hoy tenemos 15 proyectos en fase de construcción o planeación constructiva, que dan respuesta a una demanda del mercado de países como México, Brasil, Estados Unidos y Canadá. Incluso hay pedidos desde el Sur Este de Asia, donde la Casa Sin Huella es un aporte al tema de un desarrollo integralmente sostenible”, asegura el arquitecto.
Construverde así abre la puerta para que experiencias como la de la “Casa Sin Huella”, se pueda conocer en Colombia, y adaptar prototipos como este proyecto innovador, apoyando el empeño del sector constructor y del Gobierno Nacional, en trabajar por ser carbono cero a 2050.