¡Paren por favor!
Nota de Prensa: Camilo Sánchez
El «paren por favor» de Javier Ordóñez, el abogado de 46 años se iba apagando mientras recibía choques eléctricos por parte de integrantes de la Policía Nacional de Colombia en la madrugada del 9 de septiembre del año en curso. Rápidamente el video se hizo viral y abrió una vez más la polémica sobre el abuso de autoridad de algunos uniformados.
En la tarde del mismo 9 de septiembre, la indignación de buena parte de la población colombiana se hizo sentir en primera medida por redes sociales y después directamente en el CAI (Centro de Atención Inmediata) a donde Ordóñez fue trasladado tras el procedimiento policial y que se fue llenando de manifestantes que exigían justicia.
Con el paso del tiempo los enfrentamientos terminaron con uno de los saldos más negros de civiles muertos por parte de la policía en una noche llena de caos, destrucción, llamas, pero sobre todo clamor de la detención de los abusos de autoridad por parte de la policía.
248 ciudadanos heridos, de los cuales 58 por arma de fuego y que según varios videos subidos a las diferentes redes sociales son accionadas por parte de la misma policía.
Y la barbarie tras la muerte de Javier Ordóñez en la noche del 9 de septiembre se multiplicó por 10. Todos jóvenes, todos con sueños por delante, todos con familia.
Alexander Fonseca de 17 años. «Cuatro tiros. Por estar peleando por sus derechos (…) Por exigir nuestros derechos nos acribillan» Luz Mary Martínez, tía del menor fallecido.
Mientras tanto en otro punto de la ciudad, en la localidad de Suba. Julieth Ramírez, estudiante de psicología e inglés de 19 años y quien se dirigía a visitar a una amiga, contó con la mala fortuna de pasar en el momento en que se realiza un disparo que finalmente acaba con su vida. «En ese desorden que había en Suba… Una bala perdida. No sé si de la policía o de los malandros asesinaron a mi hija», manifestó Harold Ramírez padre de la joven.
Cristian Camilo Hernández, domiciliario de 26 años y padre de dos hijas de 7 y 2 años. También encontró la muerte la noche del 9 de septiembre. «Me lo encontré en la bomba y me dijo: Papá voy a entregar este domicilio y ya nos encontramos en la casa. Al llegar a la esquina lo traían los policías a rastras y le pusieron un tiro en la cabeza», comentó José Hernández, padre de la víctima.
Junto a Cristian, Julieth y Alexander también están Andrés Rodríguez de 23 años, Freddy Mahecha de 20 años, Germán Fuentes de 25 años, Julián González de 27 años, Cristian Meneses de 27 años, Marcela Zúñiga de 36 años y Angie Vásquez de 19 años.
El tiempo al final dirá si se hará justicia en al menos uno de estos casos de abuso policial. Una institución que con el paso del tiempo pierde credibilidad en la sociedad colombiana que pide con urgencia un cambio reestructural y quitarse la imagen que como José Hernández muchos comparten. «Andan cogidos de las manos de esos que venden droga y a ellos si no los cogen».