¿Puede la música reducir el dolor?
NOTI-AMERICA.COM | CHILE – Dicen que la música amansa a las fieras y que es la medicina del alma. Es cierto que desde tiempos inmemoriales, el ser humano ha utilizado la música en muchas situaciones diferentes, y esta siempre ha formado parte de nosotros mismos tanto en momentos de tristeza como de alegría. Lo de que es la medicina del alma parece que lo ha corroborado la ciencia, y de hecho se ha demostrado que puede ayudar a las personas a lidiar con el dolor.
Por ejemplo, un estudio demostró que la música es un complemento eficaz de los tratamientos basados en opioides para el dolor crónico, según informa Psychology Today.
Sin embargo, los mecanismos por los que la música ayuda a aliviar el dolor no están claros. Tampoco está claro si ciertos tipos de música son más efectivos que otros. Investigaciones anteriores han llegado a la conclusión de que el tipo de música que es más eficaz para el dolor depende del oyente y que tiene que ver con sus preferencias personales. Se ha sugerido que la música favorita de una persona puede desencadenar recuerdos emocionalmente intensos que, a su vez, pueden funcionar para combatir sentimientos desagradables o incluso el dolor físico.
Los mecanismos por los que la música ayuda a aliviar el dolor no están claros. Tampoco está claro si ciertos tipos de música son más efectivos que otros
Un nuevo estudio publicado en Frontiers in Pain Research investigó si hay temas emocionales específicos en la música que las personas encuentran efectivos para aliviar el dolor. En el estudio, los participantes escucharon música relajante (pero desconocida), así como segmentos de sus canciones favoritas seleccionadas por ellos mismos. Hay que decir que ninguno de los participantes tenía dolor crónico ni usaba analgésicos regularmente.
Para inducir el dolor agudo en el laboratorio, los investigadores utilizaron una sonda de contacto térmico para estimular diferentes puntos en los antebrazos de los participantes, aplicando una temperatura de aproximadamente 120 grados Fahrenheit durante hasta diez segundos. Los participantes informaron su dolor tanto en una escala de intensidad del dolor como en una escala de dolor y malestar, mientras escuchaban sus canciones favoritas, música relajante desconocida, versiones codificadas de estas o estaban en absoluto silencio.
Sólo la música favorita de los participantes tuvo un efecto notable en la reducción de la intensidad del dolor y el malestar en comparación con el silencio
Los resultados mostraron que sólo la música favorita de los participantes tuvo un efecto notable en la reducción de la intensidad del dolor y el malestar en comparación con el silencio. Ni la música relajante desconocida ni las versiones de su música favorita tuvieron este efecto. Además, los participantes calificaron los segmentos musicales según diferentes sensaciones que les producín, incluido si producían escalofríos musicales (también conocidos como Frisson).
Los investigadores descubrieron así que experimentar escalofríos se asociaba con un efecto analgésico más fuerte, lo que sugiere que los escalofríos pueden ser parte del mecanismo (de ahí que mucha gente sea amante del ASMR). Además, un análisis temático de las entrevistas de seguimiento con los participantes reveló cuatro categorías comunes de temas emocionales que los participantes movían asociados con los efectos analgésicos de la música: conmovedor, calmante, activo y feliz.
Estos hallazgos son prometedores, pero quedan muchas preguntas abiertas. Por ejemplo, el estudio muestra cómo escuchar tu música favorita puede ayudar a aliviar el dolor asociado con sentir un objeto caliente en la piel. ¿Se extenderán estos resultados a otros tipos de dolor o a otros contextos fuera del entorno controlado del laboratorio? Aún se necesitan más investigaciones al respecto.