¿Extraordinario o mediocre?
¿Extraordinario o mediocre?
“No es lo mismo que algo esté ok a que esté excelente”, esa es una de las frases que me dijo Humberto Gatica, ganador de 16 premios Grammy, cuando le hice la entrevista para mi libro. ¿Cómo una persona que nace en una familia humilde en Rancagua (Chile) acaba convirtiéndose en galardonado por canciones como “We are the world” de Michael Jackson o “My heart will go on” de Celine Dion? Gracias a no conformarse con lo habitual, a dar el 200% en vez del 100% y a tomar las oportunidades cuando de verdad se presentan, alcanzó lo que un día se propuso. ¿Estás tú también dispuesto a dar esa milla extra?
Ser mediocre no es tan malo como su nombre indica, simplemente es estar en la media, no sobre salir y simplemente pasar como uno más. ¿Realmente quieres eso?
Muchas personas se acercan a mí cuando terminan mis conferencias y me dicen que quieren hacer lo mismo que yo, entonces les respondo: “Te va a tocar estudiar 12 horas al día durante 5 años diferentes herramientas y cursos, te va a tocar investigar, innovar y una vez que ya seas maestro en lo que quieres entregar al mundo, estar ahí de lunes a viernes prácticamente 24 horas durante un largo tiempo hasta que la gente te conozca. Entonces ahí, quizás, comiences a tener resultados” El precio es alto, pero la recompensa lo es más.
¿Realmente estás comprometido con tu sueño?
Vivimos en la sociedad McDonald´s, lo queremos todo para ayer y a veces la calidad ni siquiera nos importa. Nos hemos acostumbrado tanto a la falta de excelencia que pensamos que es algo difícil y complicado. Sin embargo, Aristóteles ya decía que somos lo que hacemos de forma repetida, con lo cual si no estás produciendo los resultados que deseas, puede ser que estés repitiendo hábitos que no son los adecuados para alcanzar tus objetivos.
Según mi punto de vista la clave del éxito consiste en la perseverancia y en la humildad, y tienen que estar en conjunto, ya que sino, podemos encontrarnos con alguno de estos tres casos:
- a) La no acción: Si no perseveras en pos de aquello que quieres conseguir, creeme, tu sueño no va a ir a tocar tu puerta. De nada sirve ser humilde en este primer caso, porque sin acción, no hay resultado.
- b) La falta de humildad: Si perseveras pero no tienes la humildad suficiente como para partir de la premisa que siempre hay algo en la vida que no sabes, jamás podrás mejorar.Si piensas que todo lo sabes, difícilmente podrás conseguir tu objetivo, y si lo llegas a conseguir, seguramente ese éxito no sostenga.
- c) La humildad sin la perseverancia: Lo hiciste, lo intentaste, te equivocaste. Eres humilde y sabes que hubieron pasos que no tendrías que haber dado o cosas que podrías haber mejorado, pero no estás dispuesto a pasar por otro fracaso más. Aunque seas de las personas que están abiertas a aprender, si no estás dispuesto a intentarlo otra vez, jamás sabrás si verdaderamente pudiste haberlo conseguido. Tomas Edison con la bombilla no tuvo mil intentos fallidos, sino mil oportunidades para conseguir lo que quería.
El “desde dónde” tomas las decisiones marca el resultado.
Si te has propuesto conseguir un sueño o un objetivo, el “desde dónde” lo hagas será esencial para que el resultado sea positivo. Si decides emprender un negocio desde el miedo, las decisiones que tomes seguramente sean equivocadas. Si decides hacer algo sólo porque tu pareja no se enfade, seguramente no disfrutarás y jamás darás el 100%. Sin embargo, si decides emprender algo desde el amor, jamás te equivocarás, porque le pondrás todo el empeño y todo el cariño del mundo, y con esa energía nada puede salir mal. Y si en algún punto piensas que te equivocaste, jamás lo mirarás como un fracaso, porque cuando las cosas se hacen desde el amor es cuando de verdad nace el verdadero aprendizaje.
Catalina Davis
www.catalinadavismethod.com