Los Yankees de Nueva York se alejan del jonrón de Bucky Dent
Foto: Cortesía @MadDogDeMarco
Por: Marco Gámez
@magamsports
Los Yankees de Nueva York vivieron uno de sus peores momentos en mucho tiempo al ser barridos el primer fin de semana de agosto de esta temporada por sus enemigos de siempre Medias Rojas de Boston. Esas cuatro caídas los colocaron a 9.5 juegos del primer lugar, uno más lejos de tal día como este, pero hace 40 años.
La temporada de 1978 para los Bombarderos del Bronx guarda similitudes con la actual. Lesiones consecuenciales, un pitcheo abridor mono dependiente, improvisaciones y un mánager enredado, hacen evocar aquella era del Disco Music.
En esas fechas los lastimados eran los componentes ubicados alrededor de la segunda almohadilla: Willie Randolph y Bucky Dent, así como el jardinero Mickey Rivers. Además ciertos dolores del fallecido receptor y capitán Thurman Munson provocaron que el mánager Billy Martin lo ubicara, de manera desesperada, en determinado momento como jardinero derecho para no perder su bate y liderazgo.
Ahora son el cátcher Gary Sánchez y el valioso Aaron Judge quienes esperan mejoras en sus condiciones físicas para volver al terreno. Hasta el venezolano Gleyber Torres cuando estaba encendido se lesionó.
Ron Guidry, “El Relámpago de Louisiana” se perfilaba en 1978 hacia el Premio Cy Young que, posteriormente, lograría. A pesar del aporte Masahiro Tanaka y del longevo C.C. Sabathia los neoyorquinos solo parecen ver el juego favorable cuando está pautado para abrir Luis Severino, a quien a pesar de que se le presagiaba 65% de posibilidad de mejora en este certamen no se le proyectaban más de 13 ganancias. Cifra que ya superó.
El 25 de julio de 1978 despidieron al mánager Billy Martin por su enemistad con todo el mundo dentro del dugout. El afable Bob Lemon tomó las riendas y con 48 victorias y 20 reveses durante su mandato igualó a los del Fenway Park y obligó a un juego extra en ese mismo estadio.
Dicho cotejo fue definido, en buena parte, por el famoso jonrón del recuperado campo corto Bucky Dent. Una alineación cargada de poder y fue el inesperado infielder quien vulneró a “El Monstruo Verde” ubicado en el left field del mencionado recinto deportivo
Lo demás sería disponer de Reales de Kansas City en la Serie de Campeonato en la Liga Americana y en seis juegos de Dodgers de Los Angeles en la Serie Mundial.
Actualmente, llueven las críticas sobre el estratega debutante Aaron Boone quien, antes de ser firmado Giancarlo Stanton, era la gran adquisición de 2018 para un equipo que en el certamen anterior adelantó su éxito al transformarse de un equipo en reconstrucción en uno que estuvo a un juego de ir al Clásico de Octubre.
Desde marzo, en los días de los entrenamientos primaverales, Boone ha sido fustigado por el manejo de sus pitchers y ahora tan lejos del primer lugar, aunque con uno de los puestos de Comodín prácticamente en el bolsillo, vuelve a ser blanco cuando se buscan culpables de que los Yankees no estén como líderes del Este o, por lo menos, más cerca de esa casilla.
Ni muy muy, ni tan tan
El refranero del beisbol señala que ningún equipo es tan bueno como cuando gana ni tan malo como cuando pierde.
Es cierto que los Yankees tienen fallas evidentes, nadie batea .300 y su promedio colectivo de .253 está entre los cinco peores del circuito.
En el pitcheo, si bien es cierto que destacan en efectividad colectiva y promedio de bateo permitido a los rivales también se subraya que están de la mitad hacia abajo en el departamento de aperturas de calidad, lo que redunda en una sobreutilización de relevistas y en más oportunidades para evaluar el manejo de brazos de Boone, quien llegó a ser mánager de los Yankees sin experiencia previa en un rol similar y tras haber pasado las últimas ocho campañas en las cabinas de transmisión.
A pesar de todo, hasta los juegos del lunes 6 de agosto este es un equipo con 69 victorias, es decir a una de entrar en el grupo de los que suman 70, que tanto se le alaban a los exclusivos miembros Boston y Houston.
Otra vez han anotado 122 carreras más que sus rivales (en 2017 fueron 198 por encima de los oponentes).
Defensivamente exhibe el sexto mejor promedio de fildeo en la liga, con menos de 60 pecados. El problema es que Houston totaliza menos de 50 pifias.
En el resto de la temporada presenta el calendario supuestamente más fácil por la cantidad de juegos que tienen ante equipos con registros negativos y algunos enrumbados hacia los 100 reveses.
Sin embargo, lo que se ha observado de este equipo en el terreno de juego es lo que preocupa. No se ve la garra de hace 12 meses cuando cualquier ventaja en contra parecía estar al alcance por su poder jonronero y si bien dejaron casi 1200 corredores en circulación también fueron segundos en remolcadas. Además lo que se etiquetaba como el bullpen más sólido del beisbol ha mostrado flaquezas.
Menos aun se ve el ímpetu de hace 40 años cuando a pesar de luego ser tristemente famosos con el libro titulado “El Zoológico del Bronk”, publicado por el entonces relevista estelar Sparky Lyle, lograron la increíble remontada.
El juego del Comodín podría reemplazar en el historial de los Yankees al Jonrón de Bucky Dent. Un juego al igual que aquel de hace 40 años de ganar o empacar. Nadie esperaba que llegaran tan lejos en 2017, eso provocó que fueran nombrados por varias publicaciones como candidatos A1 para estar en la Serie Mundial y hasta como en 2009, su última aparición en esa etapa, ganarlo todo.