3 formas en la que los bosques pueden contribuir a una recuperación sostenible
REDACCIÓN NOTI AMÉRICA (ECUADOR)
Históricamente, la civilización, la salud y el bienestar humano han ido de la mano con los bosques y selvas ¿Cómo podrían estos apoyar a la sociedad a que se recupere de una manera más sostenible después de COVID-19?
Una gran cantidad de servicios y bienes ambientales, imprescindibles para la vida de millones de personas, están ligados a los bosques y selvas. No obstante, de la misma forma que están relacionados con nuestro bienestar, estos ecosistemas también pueden plantear graves problemas si no les cuidamos bien.
La mayoría de las nuevas enfermedades infecciosas, como la malaria, la enfermedad de Chagas, o COVID-19, son zoonóticas, y su aparición, en muchos casos, está relacionada con la fragmentación del hábitat, el uso de la tierra y el cambio climático.
1. Los bosques y las selvas contribuyen a la conservación de la biodiversidad y a disminuir los efectos del cambio climático
La pérdida de áreas forestales está vinculada con la pérdida de la biodiversidad y los efectos del cambio climático, así como a la problemática socioambiental que les acompañan.
La deforestación y la degradación forestal siguen avanzando estremecedoramente, lo cual contribuye a una mayor exposición a enfermedades zoonóticas. La tasa estimada de deforestación entre el 2015 y el 2020, fue cercana a 10 millones de hectáreas anuales, y los bosques primarios disminuyeron más de 80 millones de hectáreas en los últimos 30 años, resultando en más de 100 millones de hectáreas forestales experimentando plagas, incendios, sequías, y otros fenómenos con efectos negativos.
México perdió entre 2001 y 2018, más de 200 mil hectáreas anuales de áreas forestales, principalmente por el cambio de uso de suelo con fines agropecuarios. Así mismo, la madera ilegal con fines comerciales es casi igual al aprovechamiento maderable legal del país.
Sin duda, llevar a cabo programas y actividades de manejo y producción forestal, conservación y restauración de bosques y selvas, protección de incendios y sanidad forestal, y acciones para detener la deforestación se convierten en una necesidad para el bienestar de todos.
2. Los bosques pueden brindar alternativas económicas bajo un manejo forestal sostenible como el ecoturismo y proveer fuentes de medicinas y alimentos para comunidades vulnerables
Los efectos negativos de la pandemia, tanto en salud, economía, y aspectos sociales son visibles. Estimaciones para América Latina y el Caribe señalan que se podrían llegar a perder hasta 17 millones de empleos formales, y el porcentaje de informalidad podría alcanzar un 62%.
Esto cobra relevancia considerando que los bosques proporcionan cerca de 90 millones de empleos verdes y sustentan los medios de vida de muchas personas más. Más de 800 millones de personas de todo el mundo realizan labores como la recolección de leña, entre otras, y la mayoría de las ocasiones son realizadas por mujeres. Además, cerca de 252 millones de personas que viven en bosques y sabanas tienen ingresos inferiores a USD 1,25 al día.
De acuerdo con la Comisión Nacional Forestal en México, la actividad forestal presentó una reducción del 27% en estos meses de pandemia, principalmente en actividades de abasto y transformación maderable, y mostró una reducción en la actividad del turismo de naturaleza, afectando a un gran número de familias.
Para una recuperación sostenible en beneficio de ejidos, comunidades, pequeños propietarios y empresas privadas, se podrían impulsar acciones de manejo forestal comunitario que generen empleos, incluyendo viveros, empresas forestales; la industria del aprovechamiento y transformación maderable, así como incrementar el área forestal a través de la inversión en trabajos relacionados con la silvicultura.
3. Los bosques representan una oportunidad para diseñar respuestas oportunas a nivel territorial donde se busque beneficiar a la población rural forestal
Tenemos la oportunidad de usar los bosques para diseñar respuestas a nivel territorial donde se busque beneficiar a las comunidades rurales forestal a través de la coordinación acciones de diversas dependencias federales, estatales y municipales y de la sociedad civil.
En el contexto de la pandemia, así como en el proceso de recuperación de esta, podremos experimentar, entre otros, un aumento de la presión sobre los bosques debido a la crisis económica o el aumento de la pobreza y el desempleo.
Las acciones que se lleven a cabo para una recuperación sostenible requerirán de una gran cantidad de recursos, lo cual aunado a los efectos previstos del cambio climático, resultará en una capacidad de atención a estas crisis disminuida en todos los actores relacionados, por lo que la implementación de soluciones sostenibles basadas en la naturaleza es de suma importancia.
Un ejemplo de esto son proyectos rentables que busquen la conservación y conectividad de los ecosistemas, que permitan controlar el brote de enfermedades zoonóticas, y generen toda una serie de servicios ambientales.
En esta nueva normalidad, nos complace compartir las lecciones aprendidas y experiencia alcanzadas en proyectos de manejo forestal sostenible, los cuales puedan acompañarnos en esta recuperación sostenible. En este sentido, desde el 2016, el BID y la Fundación Ecológica Selva Negra A.C. (creada por Maná) realizaron un proyecto con el objetivo de reducir la degradación forestal y aumentar la resiliencia la Sierra de Ahuisculco.
En el marco de esta cooperación técnica, y al cierre del proyecto en octubre del 2020 se logró:
- La conservación del suelo y reforestación con 41,500 árboles de especies nativas en el corredor biológico de la Sierra de Ahuisculco, en más de 40 hectáreas; esta acción fue acompañada por la preparación de un estudio sobre el CO2 capturado por estas actividades.
- El Plan de Negocios del vivero de la Cooperativa de Productores Asociados de Ahuisculco, para consolidarla como una empresa socioambiental rentable, dirigida principalmente por mujeres.
- La difusión de iniciativas para concientizar sobre el cambio climático y sus efectos, destacándose el evento virtual sobre bosques y cambio climático, con más de 1000 participantes.
Nos gustaría compartir en este video, los aprendizajes del proyecto, que se podrían impulsar como acciones de recuperación sostenible de manera local o regional.
Los bosques contribuyen ampliamente en poder alcanzar una recuperación sostenible. Este proyecto mostró los grandes beneficios de los bosques, tanto para enfrentar la crisis climática y ecológica a la vez de apoyar a las comunidades rurales. ¡Es sumamente importante cuidar estos ecosistemas extraordinarios!
Fuente: BID